viernes, 26 de diciembre de 2008

Mensaje del Sínodo sobre la Palabra de Dios en preguntas y respuestas



MENSAJE AL PUEBLO DE DIOS DE LA XII ASAMBLEA GENERAL ORDINARIA DEL SÍNODO DE LOS OBISPOS

Texto íntegro: http://www.vatican.va/roman_curia/synod/documents/rc_synod_doc_20081024_message-synod_sp.html




1.¿Cómo comienza el mensaje?
“Paz... y caridad con fe de parte de Dios Padre y del Señor Jesucristo. La gracia sea con todos los que aman a nuestro Señor Jesucristo en la vida incorruptible”, es decir con el final de la carta de San Pablo a los cristianos de Éfeso (6, 23-24).

2.¿A quiénes se dirige el mensaje del Sínodo?
Al inmenso horizonte de todos aquellos que en las diferentes regiones del mundo siguen a Cristo como discípulos y continúan amándolo con amor incorruptible.

3.¿Cuál es la propuesta del Sínodo?
El Sínodo propone de nuevo la voz y la luz de la Palabra de Dios, citando dos textos bíblicos: “La palabra está muy cerca de ti, en tu boca y en tu corazón, para que la pongas en práctica” (Dt 30, 14) y “Hijo de hombre, todas las palabras que yo te dirija, guárdalas en tu corazón y escúchalas atentamente” (Ez 3, 10). Esto se realiza mediante un viaje espiritual desarrollado en cuatro etapas, desde lo eterno e infinito de Dios hasta nuestras casas.

I.LA VOZ DE LA PALABRA Y LA REVELACIÓN.

4.¿Cómo se presentó desde el principio Dios?
Dios no se presentó como una imagen o una estatua similar al becerro de oro, sino con “rumor de palabras”. Es una voz que había entrado en escena en el preciso momento del comienzo de la creación, cuando había rasgado el silencio de la nada (Gn 1, 1.3; Jn 1, 1-3).

5.¿Cuál es la primera revelación “cósmica”?
Es la que hace que lo creado se asemeje a una especie de inmensa página abierta delante de toda la humanidad, en la que se puede leer un mensaje del Creador. Así lo canta el salmista: “Los cielos cuentan la gloria de Dios, el firmamento anuncia la obra de sus manos” (Sal 19, 2)

6.¿Cómo es la relación entre la Palabra de Dios y el ser humano y la historia?
La Palabra de Dios salva y juzga, penetra en la trama de la historia con su tejido de situaciones y acontecimientos. “He visto la aflicción de mi pueblo en Egipto” (Ex 3, 7), dirá Yahvé a Moisés. Hay una presencia divina en las situaciones humanas que, mediante la acción del Señor en la historia, se insertan en un plan más elevado de salvación, para que “todos los hombres se salven y lleguen al conocimiento de la verdad” (1 Timoteo 2, 4). Así la Palabra divina eficaz, creadora y salvadora, está en el principio del ser y de la historia, de la creación y la redención.

7. ¿Qué son las Sagradas Escrituras?
Son el “testimonio” en forma escrita de la Palabra divina, el memorial canónico, histórico y literario que atestigua el evento de la Revelación creadora y salvadora.

8.¿Cuál es la relación entre la Palabra de Dios y la Biblia?
La Palabra de Dios precede y excede la Biblia, si bien está “inspirada por Dios” y contiene la Palabra Divina eficaz (2 Timoteo 3, 16).

9.¿Dónde está el centro de nuestra fe?
El centro de nuestra fe no es un libro, sino una historia de salvación y una persona, Jesucristo, Palabra de Dios hecha carne, hombre, historia.

10.¿Es necesario el Espíritu Santo?
Sí, pues él “guía hasta la verdad completa” (Juan 16,13) a quién lee la Biblia.

11.¿Por qué es importante la Tradición?
Porque ella es presencia eficaz del “Espíritu de verdad” en la Iglesia, guardián de las Sagradas Escrituras, auténticamente interpretadas por el Magisterio eclesial. Con la Tradición se llega a la comprensión, la interpretación, la comunicación y el testimonio de la Palabra de Dios.

II.EL ROSTRO DE LA PALABRA: JESUCRISTO.

12.¿Qué frase es el corazón mismo de la fe cristiana?
La frase del prólogo del evangelio de San Juan: “El Verbo/Palabra se hizo carne” (1, 14)

13.¿Cuál es la relación de Jesucristo con la Palabra?
El es la Palabra eterna y divina que entra en el espacio y en el tiempo y asume un rostro y una identidad humana, tan es así que es posible acercarse a ella directamente pidiendo, como hizo aquel grupo de griegos presentes en Jerusalén: “Queremos ver a Jesús”(Juan 12, 20-21).

14.¿Es importante el rostro para las palabras?
Sí, pues las palabras sin un rostro no son perfectas, porque no cumplen plenamente el encuentro, como recordaba Job, cuando llegó al final de su dramático itinerario de búsqueda: “Sólo de oídas te conocía, pero ahora te han visto mis ojos” (Job 42, 5)

15.¿Quién es Cristo?
Es “la Palabra que está junto a Dios y es Dios”, es “imagen de Dios invisible, primogénito de toda la creación” (Colosenses 1, 15), es Jesús de Nazaret, que camina por las calles de una provincia marginal del imperio romano, que habla una lengua local, que presenta los rasgos de un pueblo, el judío, y de su cultura. El Jesucristo real es carne frágil y mortal, historia y humanidad, pero también es gloria, divinidad, misterio.

16.¿Qué significa la dimensión “carnal” de la Biblia?
Significa que la Biblia, “carne”, “letra”, se expresa en lenguas particulares, en formas literarias e históricas, en concepciones ligadas a una cultura antigua, guarda memoria de hechos a menudo trágicos, sus páginas están surcadas no pocas veces de sangre y violencia, en su interior resuena la risa de la humanidad y fluyen las lágrimas, así como se eleva la súplica de los infelices y la alegría de los enamorados.

17.¿Qué exige esta dimensión “carnal”?
Exige un análisis histórico y literario, que se lleva a cabo a través de los distintos métodos y enfoques ofrecidos por la exégesis bíblica. Así cada lector de las Sagradas Escrituras, incluso el más sencillo, debe tener un conocimiento proporcionado del texto sagrado.

18.¿Por qué es importante esto?
Porque si se lo excluye se podría caer en un fundamentalismo que prácticamente niega la encarnación de la Palabra divina en la historia, no reconoce que esa palabra se expresa en un lenguaje humano, que tiene que ser descifrado, estudiado y comprendido, e ignora que la inspiración divina no ha borrado la identidad histórica y la personalidad propia de los autores humanos.

20.Pero, además, ¿exige otra comprensión?
Sí, pues la Biblia es Verbo eterno y divino. Así exige otra comprensión dada por el Espíritu Santo que desvela la dimensión trascendente de la Palabra divina, presente en palabras humanas.

21.¿Qué es necesario para comprender de un modo unitario y pleno las Sagradas Escrituras”?
La Viva Tradición de toda la Iglesia (Concilio Vaticano II, Dei Verbum 12).

22.¿Cuáles son los dos peligros que tenemos de cara a la Biblia?
Si nos detenemos sólo en la “letra” la Biblia se reduce a un solmene documento del pasado, un noble testimonio ético y cultura. Pero si se excluye la encarnación, se puede caer en el equívoco fundamentalista o en un vago espiritualismo o psicologismo.

23.¿Con qué ha de entrelazarse indisolublemente el conocimiento exegético?
Con la tradición espiritual y teológica para que no se quiebre la unidad divina y humana de Jesucristo y de las Escrituras.

24.¿Qué aporta Cristo a la Biblia?
La unidad profunda e íntima de las Sagradas Escrituras. Cristo proyecta retrospectivamente su luz sobre la entera trama de la historia de la salvación y revela su coherencia, su significado, su dirección. Él es el sello, “el Alfa y la Omega” (Apocalipsis 1, 8) de un diálogo entre Dios y sus criaturas repartido en el tiempo y atestiguado en la Biblia. Es a la luz de este sello final como adquieren su “pleno sentido” las palabras de Moisés y de los profetas.

25.¿Dónde está el fin del conocimiento de la Biblia?
Este no está “en una decisión ética o una gran idea, sino en el encuentro con un acontecimiento, con una Persona, que da un nuevo horizonte a la vida y, con ella, una orientación decisiva” (Benedicto XVI, Deus caritas est, 1).

III. LA CASA DE LA PALABRA: LA IGLESIA.

26.¿Cuál es la casa de la Palabra de Dios?
Es la Iglesia que posee su modelo en la comunidad-madre de Jerusalén, la Iglesia, fundada sobre Pedro y los apóstoles y que hoy, a través de los obispos en comunión con el sucesor de Pedro, sigue siendo garante, animadora e intérprete de la Palabra? (Concilio Vaticano II, Lumen Gentium 13).

27.¿Cuáles son las cuatro columnas sobre las que se asienta esta casa?
Son la enseñanza de los apóstoles, la vida común, la fracción del pan y las oraciones (Hechos 2, 42).

28.¿Cómo se concreta la didache apostólica, es decir, la predicación de la Palabra de Dios?
En el kérygma o anuncio primario y fundamental que el mismo Jesús había proclamado al comienzo de su ministerio público (arrepentios y creed en el Evangelio, Marcos 1, 15) y los apóstoles anunciaron (en ningún otro hay salvación, Hechos 4, 12). Seguidamente en la catequesis destinada a profundizar en el cristiano “el Misterio de Cristo a la luz de la Palabra para que todo hombre sea irradiado por ella” (Juan Pablo II, Catechesi tradendae, 20). Pero el apogeo de la predicación está en la homilía.

29.¿Cuál es la misión del ministro en la homilía?
Él ministro debería transformarse en profeta. Él debe con un lenguaje nítido, incisivo y sustancial y no sólo con autoridad “anunciar las maravillosas obras de Dios en la historia de la salvación” (Concilio Vaticano II, Sacrosanctum Concilium 35), ofrecidas anteriormente a través de una clara y viva lectura del texto bíblico, haciendo germinar en los corazones de los oyentes la pregunta para la conversión y el compromiso vital.

30.¿Qué suponen el anuncio, la catequesis y la homilía?
Suponen la capacidad de leer y de comprender, de explicar e interpretar, implicando la mente y el corazón.
31.¿Cuál es el doble movimiento de la predicación?
El primer movimiento implica remontarse a los orígenes de los textos sagrados, de los eventos, de las palabras generadoras de la historia de la salvación para comprenderlas en su significado y en su mensaje. Con el segundo movimiento se vuelve al presente, a la actualidad vivida por quiene scucha y lee siempre a la luz del Cristo que es el hilo luminoso destinado a unir las Escrituras. Así lo hizo Jesús con los discípulos de Emaús y el diácono Felipe con el etíope.

32.¿Cuál es la segunda columna de la casa de la Palabra de Dios?
La fracción del pan.

33.¿Cuál es la relación entre la Liturgia de la Palabra y la Liturgia Eucarística?
Su origen lo encontramos en la escena de Emaús (Lucas 24,13-35). En ella después de la homilía sobre Moisés y los profetas aparece, en la mesa, la fracción del pan eucarístico. El Concilio Vaticano II en la Dei Verbum, número 21, afirma: “La Iglesia ha venerado siempre las Sagradas Escrituras al igual que el mismo Cuerpo del Señor, no dejando de tomar de la mesa y de distribuir a los fieles el pan de vida tanto de la Palabra de Dios como del Cuerpo de Cristo” . Por eso se deberá volver a poner en el centro de la vida cristiana “la Liturgia de la Palabra y la Eucarística que están tan íntimamente unidas de tal manera que constituyen un solo acto de culto” (Sacrosanctum Concilium 56).

34.¿Cuál es la tercera columna del edificio espiritual de la Iglesia?
Es la que está constituida por las oraciones, entrelazadas por “salmos, himnos, alabanzas espontáneas” (Colosenses 3, 16).

35.¿Cómo se concreta esta columna?
Se concreta en la Liturgia de las horas, es decir, la oración de la Iglesia por excelencia, destinada a marcar el paso de los días y de los tiempos del año cristiano que ofrece, sobre todo con el Salterio, el alimento espiritual cotidiano del fiel. Junto a ésta y a las celebraciones comunitarias de la Palabra, la tradición ha introducido la práctica de la Lectio divina.

36.¿Qué es la lectio divina?
Es la lectura orante en el Espíritu Santo, capaz de abrir al fiel no sólo el tesoro de la Palabra de Dios sino también de crear el encuentro con Cristo, Palabra divina y viviente.

37.¿Cuáles son los pasos de la lectio divina?
Lectura (lectio) del texto que conduce a preguntarnos sobre el conocimiento auténtico de su contenido práctico: ¿qué dice el texto bíblico en sí?
Meditación (meditatio) en la cual la pregunta es: ¿qué nos dice el texto bíblico?
Oración (oratio) que supone la pregunta: ¿qué le decimos al Señor como respuesta a su Palabra?
Se concluye con la contemplación (contemplatio) durante la cual asumimos como don de Dios la misma mirada para juzgar la realidad y nos preguntamos: ¿qué conversión de la mente, del corazón y de la vida nos pide el Señor?



38.¿Cuáles son los modelos concretos de lector orante de la Palabra de Dios?
María que “conservaba estas cosas y las meditaba en su corazón” (Lucas 2, 19) y María, la hermana de Marta, que se sienta a los pies del Señor a la escucha de su Palabra, no dejando que las agitaciones exteriores le absorban enteramente su alma (Lucas 10, 38-42).

39.¿Dónde encontramos la última columna, es decir, la comunión fraterna (koinonía)?
Jesús afirmó que para convertirse en sus hermanos o hermanas se necesitaba ser “los hermanos que oyen la Palabra de Dios y la cumplen” (Lc 8,21). La escucha auténtica es obedecer y actuar, es hacer florecer en la vida la justicia y el amor, es ofrecer tanto en la existencia como en la sociedad un testimonio en la línea del llamado de los profetas que constantemente unía la Palabra de Dios y la vida, la fe y la rectitud, el culto y el compromiso social.

40.¿Por qué es importante esta columna?
Porque se apoya en las palabras de Jesús: “No todo el que me dice: ¡Señor, Señor! entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos” (Mateo 7, 21) y de Isaías: Este pueblo se me acerca con su boca y con sus labios me honra, pero su corazón está lejos de mí” (Isaías 29, 13). Estas advertencias son también para las iglesias cuando no son fieles a la escucha obediente de la Palabra de Dios. Así el hombre justo y fiel no sólo “explica” las Escrituras, sino que las “despliega” frente a todos como realidad viva y práctica. Así la vida de los buenos es una lectura/lección viviente de la Palabra divina (viva lectio, vita bonorum)

41.¿Cómo se debe reforzar el vínculo con los hermanos y las hermanas de las otras iglesias y comunidades eclesiales?
Con ellos, con quienes se reencuentran con nosotros en la veneración y en el amor por la Palabra de Dios, debe colaborarse mediante las traducciones bíblicas comunes, la difusión del texto sagrado, la oración bíblica ecuménica, el diálogo exegético, el estudio y la comparación entre las diferentes interpretaciones de las Sagradas Escrituras, el intercambio de las valores propios de la diversas tradiciones espirituales, el anuncio y el testimonio común de la Palabra de Dios en un mundo secularizado.



IV. LOS CAMINOS DE LA PALABRA: LA MISIÓN.



41.¿Hay hambre de Dios en este mundo?
Sí, existe en la moderna ciudad secularizada un deseo escondido, una esperanza germinal, una conmoción de esperanza. A este hambre quiere responder la misión evangelizadora de la Iglesia.

42.¿Por qué hemos de evangelizar?
Por que es un mandato de Cristo resucitado, quien lanza el llamado a los apóstoles, titubeantes para salir de las fronteras de su horizonte protegido: “Por tanto, id a todas las naciones, haced discípulos y enseñadles a obedecer todo lo que os he mandado” (Mateo 28, 19-20).

43.¿Son importantes las Biblias?
Sí, pues la Palabra de Dios se debe difundir mediante el texto impreso, con traducciones que respondan a la variedad de idiomas de nuestro planeta.

44.¿Tienen valor para la Iglesia las nuevas tecnologías?
Sí, la Palabra de Dios debe resonar también a través de la radio, las autopistas de la información de Internet, los canales de difusión virtual on line, los CD, los DVD, los podcast (MP3) y otros; debe aparecer en las pantallas televisivas y cinematográficas, en la prensa, en los eventos culturales y sociales.

45.¿Qué exige esta nueva comunicación, que tiene una gramática expresiva específica?
Exige estar preparados no sólo en el plano técnico, sino también cultura para dicha empresa.

46.¿Quién nos puede ayudar en un tiempo dominado por la imagen, propuesta especialmente desde la televisión?
Cristo. Él recurría al símbolo, a la narración, al ejemplo, a la experiencia diaria, a la parábola (Mateo 13, 3.34). Jesús en su anuncio dle reino de Dios, nunca se dirigía a sus interlocutores con un lenguaje vago, abstracto y etéreo, sino que les conquistaba partiendo justamente de la tierra, donde apoyaban sus pies para conducirlos de lo cotidiano, a la revelación del reino de los cielos.

47.¿Qué relación tiene la familia y la Palabra de Dios?
Cristo camina por las calles de nuestras ciudades y se detiene ante el umbral de nuestras casas: “Mira que estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi palabra y me abre la puerta, entraré en su casa, cenaré con él y él conmigo” (Apocalipsis 3, 2). La familia, encerrada en su hogar, con sus alegrías y sus dramas, es un espacio fundamentan en el que debe entrar la Palabra de Dios.

48.¿Son importantes los padres en la transmisión de la Palabra?
Sí. La Palabra de Dios se transmite de una generación a otra, por lo que los padres se convierten en “los primeros predicadores de la fe” (Lumen Gentium 11). Así lo recordaba el salmista: “lo que hemos oído y aprendido, lo que nuestros padres nos contaron, no queremos ocultarlo a nuestros hijos, lo narraremos a la próxima generación” (Salmo 78, 3-4).

49.¿Ha de estar presente la Biblia en las casas?
Sí, cada casa deberá tener su Biblia y custodiarla de modo concreto y digno, leerla y rezar con ella, mientras que la familia deberá proponer formas y modelos de educación orante, catequística y didáctica sobre el uso de las Escrituras, para que “jóvenes y doncellas también, los viejos junto con los niños” (Salmo 148, 12) escuchen, comprendan, alaben y vivan la Palabra de Dios.

50.¿De qué han de ser destinatarios los niños y jóvenes?
De una pedagogía apropiada y específica, que los conduzca a experimentan el atractivo de la figura de Cristo, abriendo la puerta de su inteligencia y su corazón, a través del encuentro y el testimonio auténtico del adulto, la influencia positiva de los amigos y la gran familia de la comunidad eclesial.



51.¿Tiene presente la Biblia el sufrimiento del ser humano?
Sí, la Biblia representa incesantemente el inmenso grito de dolor que sube de la tierra hacia el cielo. Bastaría sólo con pensar en las páginas marcadas por la violencia y la opresión, en el grito áspero y continuado de Job, en las vigorosas súplicas de los salmos, en la sutil crisis interior que recorre el alma del Eclesiastés, en las vigorosas denuncias proféticas contra las injusticias sociales. Además se presenta sin atenuantes la condena del pecado radical, que aparece en todo su poder devastador desde los exordios de la humanidad en un texto fundamental del Génesis (capítulo 3).

52.¿Cuál es la respuesta de la Biblia ante el mal?
La Palabra de Dios asegura en Cristo la victoria del bien sobre el mal. Así Cristo comienza su ministerio público con un anuncio de esperanza para los últimos de la tierra (Lucas 4, 18-19). Sus manos tocan repetidamente cuerpos enfermos o infectados, sus palabras proclaman la justicia, infunden valor a los infelices, conceden el perdón a los pecadores. Al final, él mismo se acerca al nivel más bajo (Filipenses 2, 7-8), experimentando la soledad con el abandono y la traición de los amigos. Él penetra en la oscuridad del dolor físico más cruel con la crucifixión e incluso en las tinieblas del silencio del Padre (“Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?”) y llega al precipicio último de cada hombre, el de la muerte (“dando un fuerte grito, expiró”). Así, siente miedo de morir (“Padre, si es posible, (¡aparta de mí este cáliz!”), experimenta la soledad con el abandono y la traición de los amigos, penetra en la oscuridad del dolor físico más cruel con la crucifixión e incluso en las tinieblas del silencio del Padre (“Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?”) y llega al precipicio último de cada hombre, el de la muerte (“dando un fuerte grito, expiró”). Y aún así, también en ese momento extremo, no deja de ser el Hijo de Dios: en su solidaridad de amor y con el sacrificio de sí mismo siembra en el límite y en el mal de la humanidad una semilla de divinidad, o sea, un principio de liberación y de salvación.

53.¿Cuál es la misión del cristiano?
Anunciar esta Palabra divina de esperanza, compartiéndola con los pobres y los que sufren, mediante el testimonio de su fe en el Reino de verdad y vida, de santidad y gracia, de justicia, de amor y paz, mediante la cercanía amorosa que no juzga ni condena, sino que sostiene, ilumina, conforta y perdona.

54.¿Nos pueden ayudar los judíos en la comprensión de la Biblia?
El pueblo judío, al que estamos íntimamente unidos a través del reconocimiento común y el amor por las Escrituras del Antiguo Testamento, y porque de Israel “procede Cristo según la carne” (Romanos 9, 5), nos ayuda y nos permiten enriquecer nuestra interpretación de las Sagradas Escrituras con los recursos fecundos de la tradición exegética judaica.

55.¿Cuál ha de ser nuestra relación con las otras religiones?
Sin caer en el sincretismo estamos invitados a entrar con respeto en diálogo con los hombres y mujeres de otras religiones, que escuchan y practican fielmente las indicaciones de sus libros sagrados.

56.¿Qué nos une a los musulmanes?
El islamismo, en su tradición acoge innumerables figuras, símbolos y temas bíblicos y nos ofrece el testimonio de una fe sincera en el Dios único, compasivo y misericordioso, Creador de todo el ser y Juez de la humanidad.

57.¿Qué nos enseñan las grandes tradiciones religiosas de Oriente?
El cristiano encuentra sintonías comunes con quienes nos enseñan en sus textos sagrados el respeto a la vida, la contemplación, el silencio, la sencillez, la renuncia, como sucede en el budismo. O bien, como en el hinduismo, exaltan el sentido de lo sagrado, el sacrificio, la peregrinación, el ayuno, los símbolos sagrados. El confucionismo enseña la sabiduría y los valores familiares y sociales.

58.¿Cuál ha de ser nuestra actitud ante las religiones tradicionales?
De respetuoso diálogo.

59.¿Cómo ha de ser nuestra relación con los no creyentes?
Con cuantos no creen en Dios pero se esfuerzan por “respetar el derecho, amar la lealtad, y proceder humildemente” (Miqueas 6, 8) tenemos que trabajar por un mundo más justo y en paz, y ofrecer en diálogo nuestro genuino testimonio de la Palabra de Dios, que puede revelarles nuevos y más altos horizontes de verdad y de amor.

60.¿Cuál es la relación de la Biblia con la cultura?
“La Sagrada Escritura se ha convertido en una especie de inmenso vocabulario” (Paul Claudel) y de “Atlas iconográfico” (M. Chagall) del que se han nutrido la cultura y el arte cristianos. Goethe estaba convencido de que el Evangelio fuera la “lengua materna de Europa”. La Biblia es “el gran código” de la cultura universal.

61.¿Por qué es importante la Biblia?
Porque en ella se encuentra la raíz de nuestra grandeza y mediante ella podemos presentarnos con un noble patrimonio a las demás civilizaciones y culturas, sin ningún complejo de inferioridad. Por lo tanto, todos deberían conocer y estudiar la Biblia, bajo este extraordinario perfil de bellez ay fecundidad humana y cultural.

62.¿Qué es la inculturización?
Es hacer que la Palabra de Dios penetre en la multiplicidad de las culturas y expresarla según sus lenguajes, sus concepciones, sus símbolos y sus tradiciones religiosas. Sin embargo debe ser capaz de custodiar la sustancia de sus contenidos, vigilando y evitando el riesgo de degeneración.

CONCLUSIÓN.

63.¿A qué nos invita el Sínodo?
Acerquémonos a la mesa de la Palabra de Dios, para alimentarnos y vivir “no sólo de pan, sino de toda palabra que sale de la boca del Señor” (Deuteronomio 8, 3; Mateo 4, 4). La Sagrada Escritura –como afirmaba una gran figura de la cultura cristiana – “tiene pasajes adecuados para consolar todas las condiciones humanas y pasajes adecuados para atemorizar en todas las condiciones” (Blas Pascal, 532).

64.¿Cuáles son los efectos de la Palabra de Dios?
Es “mas dulce que la miel, más que el jugo de panales” (Salmo 19, 12), “antorcha para mis pasos, luz para mi sendero”(Salmo 119), “como fuego y como martillo que golpea la peña” (Jeremías 23, 29), como lluvia que empapa la tierra, la fecunda y la hace germinar, haciendo florecer de este modo también la aridez de nuestros desiertos espirituales (Isaías 55, 10-11), “viva, eficaz y más cortante que una espada de dos filos” (Hebreos 4, 12)

65.Finalmente, ¿a qué nos invitan los Padres Sinodales?
Hagamos ahora silencio para escuchar con eficacia la Palabra del Señor y mantengamos el silencio luego de la escucha porque seguirá habitando, viviendo en nosotros y hablándonos. Hagámosla resonar al principio de nuestro día, para que Dios tenga la primera palabra y dejémosla que resuene dentro de nosotros por la noche, para que la última palabra sea de Dios”.

miércoles, 24 de diciembre de 2008

Feliz Navidad


Desde este blog os deseo a todos una Feliz Navidad: Que el Amor acampe en vuestros corazones.


Y aqui tenéis links donde encontraréis abundante material entorno a esta fiesta.

Muy bueno este, por la gran cantidad de textos: http://www.mercaba.org/LITURGIA/Nv/dossier_nv.htm

http://www.mercaba.org/FERIAS/NV/navidad.htm

Javier Leoz también nos ofrece este material, con abundancia de power points:

http://www.mercaba.org/pagina_javier_leoz.htm

lunes, 22 de diciembre de 2008

Tiempo de Adviento. 22 de Diciembre


OCTAVA PREPARATORIA DE LA NAVIDAD

LUNES III T.A.

Oración:

Tomo conciencia de hallarme en presencia de Dios, fijando la mirada en una estampa o cerrando los ojos. Me signo mientras rezo la siguiente oración, consciente de mi incapacidad para orar:
Dios mío, ven en mi auxilio. Señor, date prisa en socorrerme.

Texto bíblico
Cuando lo hubo destetado, lo subió consigo, llevando además un novillo de tres años, una medida de harina y un odre de vino. Al llegar, hizo entrar en casa de Yahvé, en Siló, al niño, que todavía era muy pequeño. Inmolaron el novillo y llevaron el niño a Elí. Ella dijo:
-Óyeme, señor. Por tu vida, señor, yo soy la mujer que estuvo aquí junto a ti, orando a Yahvé. Este niño pedía ya, y Yahvé me ha concedido la petición que le hice. Ahora se lo ofrezco a Yahvé por todos los días de su vida; está ofrecido a Yahvé.
Y se postró allí, ante Yahvé.
1 Samuel 1, 24-28


Lectio (¿qué dice el texto?)


El relato viene precedido por la concepción de Samuél. Ana es estéril, sube al templo, pide a Dios que le conceda un hijo. Al regresar se unió a su marido y concibió a quien sería el primer gran profeta de Israel y el gobernante responsable de instaurar la monarquía, escogiendo primero a Saúl y posteriormente a David como reyes de Israel. En este relato ocurre lo mismo que con el anuncio de los grandes personajes de la historia de Israel: Isaac, José, Sansón, Juan el Bautista y Jesús. En ellos se manifiesta el poder de Dios que actúa sobre mujeres estériles, causa de humillación social.

Meditatio (¿qué me dice el texto?)

Ana ofrece a Dios su hio porque él le ha quitado la afrenta. Por el nacimiento de Jesús Dios ha quitado la afrenta a la humanidad. Ella estaba llamada a dar vida, pero a causa del pecado era incapaz. Jesús la redime, haciéndola fecunda. Pero no sólo la humanidad a nivel general. En este momento te invito a que entres en tu corazón. También a ti te ha quitado la afrenta. Por el bautismo has sido limpiado del pecado y has renacido a una vida nueva. Como cristiano que eres ya puedes dar vida. Sin embargo en ti siguen presentes las huellas del pecado, que te impiden amar y provocan en ti un vacío. Jesús viene estas navidades a llenar el vacío de tu alma, consecuencia del pecado, del egoísmo. En tu interior eres incapaz de dar vida. Te sientes vacío, buscas llenarlo con lo que no es vida. y sólo Dios puede llenar tu corazón. Así pues mira en tu interior: ¿qué es lo que impide que des vida, ames, te entregues a los demás, seas generoso, seas feliz?

Oratio:


Habiendo entrado en las entrañas de tu corazón, consciente de tu realidad. Pídele que estas navidades Él entre en tu vida, la fecunde con la Palabra, el Evangelio, su presencia. Sólo si Dios germina en tu corazón serás capaz de dar vida. Si ya ha ocurrido, toma la Biblia y continua el texto, proclamando y haciendo propio el canto de Ana. También te puede ayudar el mirar como Dios ha actuado en ti. Revisar tu vida, pensar en otros tiempos, cuando no frecuentabas la Iglesia y vivías apartado de Dios. Él ha llenado tu corazón con su amor y así hoy eres una persona feliz porque ama y amas porque te sientes amado o amada de Dios, habitado o habitada por Él.

martes, 16 de diciembre de 2008

Misa Niños Domingo IV Tiempo de Adviento

Monición de entrada.
Buenos días a todos. Cada día estamos más alegres y con más emoción en los corazones. Viene el Señor y además lo hace la Virgen María.
Hoy, nuestros ojos, están puestos en ella, quien, con pocas palabras, hizo y dijo mucho: hágase en mí según tu palabra.
Que también nosotros, a la vez que encendemos el 4º cirio de Adviento, digamos a los cuatro vientos que la Navidad es el Nacimiento de Jesús. ¿Seremos capaces de vivir todo esto?


Monición encendido corona
Las calles de nuestro pueblo ya están adornadas con las luces. Nosotros también vamos a encender ahora la tercera vela. Esta tercera es la vela de la alegría.



Señor ten piedad 1.

Pidamos perdón, en este domingo de adviento, por las veces que no escuchamos la voz del Señor. Señor ten piedad

Señor ten piedad 2.

Pidamos perdón, en este domingo de adviento, las veces que no somos obedientes. Cristo, ten piedad

Señor ten piedad 3.

Pidamos perdón, en estas vísperas de la Navidad, por no dejar sitio en nuestros corazones a Dios. Señor, ten piedad

Peticiones 1

Por la Iglesia: Para que esté siempre dispuesta a enseñarnos a amar a Jesús. Roguemos al Señor.



Peticiones 2
Por aquellos que, en Navidad, no se darán cuenta de lo mucho que Dios nos



Peticiones 3


Por todos nosotros. Para que amemos más a la Virgen y nos acordemos de rezarle.

Ofrendas
Con esta CUNA VACÍA representamos nuestro deseo de que Dios venga a nuestras familias, de acogerle en nuestras vidas, en nuestras parroquias y en nuestros corazones.

Tiempo de Adviento. Lunes III




Oración:
Tomo conciencia de hallarme en presencia de Dios, fijando la mirada en una estampa o cerrando los ojos. Me signo mientras rezo la siguiente oración, consciente de mi incapacidad para orar:
Dios mío, ven en mi auxilio. Señor, date prisa en socorrerme.

Texto bíblico
Viendo Balaán que el Señor tenía a bien bendecir a Israel, no anduvo como las otras veces en busca de presagios, sino que se volvió hacia el desierto, y tendiendo la vista, divisó a Israel acampado por tribus. El Espíritu de Dios vino sobre él y recitó sus versos:
Oráculo de Balaán, hijo de Beor;
oráculo del hombre de ojos perfectos,
oráculo del que escucha palabras de Dios,
que contempla visiones del todopoderoso,
en éxtasis, con los ojos abiertos.
¡Que bellas las tiendas de Jacob
y las moradas de Israel!
Como vegas dilatadas,
como jardines junto al río,
como áloes que plantó el Señor
o cedros junto a la corriente;
el agua rebosa de sus cubos
y con el agua se multiplica su simiente.
Su rey es más alto que Agag
y su reino descuella.
Dios lo sacó de Egipto
embistiendo como un búfalo.
Devorará a las naciones enemigas
y triturará a sus huesos,
las traspasará con sus flechas.
Se agazapa y se tumba como un león,
o como una leona, ¿quién lo desafiará?
Bendito quien te bendiga,
maldito quien te maldiga.
Oráculo de Balaán, hijo de Beor;
oráculo del hombre de ojos perfectos,
oráculo del que escucha palabras de Dios
y conoce los planes del Altísimo,
que contempla visiones del Todopoderoso,
en éxtasis, con los ojos abiertos.
Lo veo, pero no es ahora;
lo contemplo, pero no será pronto.
Avanza la constelación de Jacob
y sube el cetro de Israel.
Triturará la frente de Moab,
y el cráneo de los hijos de Set.
Números 24, 2-9.15-17

Lectio (¿qué dice el texto?)
El libro de los Números nos ofrece el relato de la estancia del pueblo en el Sinaí, su peregrinar hasta la tierra prometida. Surge un personaje misterioso, un adivino pagano: Balaán, al que contrata Balaak, rey de Moab y enemigo de Israel, para que lo maldiga. Sin embargo el Ángel de Dios se le aparece y le prohíbe maldecidlo, por ello Balaan bendice a Israel con este oráculo. En él se anuncia un rey que vencerá a Agag. Éste fue Saúl, si bien, en cuanto profecía se refiere a Jesús. Por otra parte anuncia la aparición de un nuevo astro, signo en la antigüedad de la aparición de un gran personaje. Mateo tomará esta estrella como signo del nacimiento de Jesús.

Meditatio (¿qué me dice el texto?)
Puedes leerlo dirigido a ti. Es un poema de amor de Dios a quien perteneces al nuevo pueblo de Israel, la Iglesia. Así nos ve Dios. Por otra parte déjate cautivar por los sentimientos que en el texto se expresan.

Oratio:
Estas cara a cara con Quien habita en tu corazón. ¿Qué le dices después de haber leído y meditado su Palabra?

Tiempo de Adviento. Domingo III


He aquí los enlaces que te ayudarán a meditar:





Tiempo de Adviento. Sábado II


Oración:
Tomo conciencia de hallarme en presencia de Dios, fijando la mirada en una estampa o cerrando los ojos. Me signo mientras rezo la siguiente oración, consciente de mi incapacidad para orar:
Dios mío, ven en mi auxilio. Señor, date prisa en socorrerme.

Texto bíblico:
El Espíritu del Señor está sobre mí,
porque el Señor me ha ungido.
Me ha enviado
para dar la buena noticia a los pobres,
para curar los corazones desgrarrados,
y anunciar la libertación a los cautivos,
a los prisioneros la libertad.
Me ha enviado para anunciar
un año de gracia del Señor.
El Señor me hace desbordar de gozo,
y mi Dios me colma de alegría,
porque me ha vestido
un traje de liberación,
y me ha cubierto
con un manto de salvación,
como novio que se pone la corona
o novia que se adorna con sus joyas.
Pues como la tierra echa sus brotes
y un huerto hace germinar la semilla,
así el Señor hará germinar la salvación
y la alabanza a todos los pueblos.

Isaías 61, 1-2ª.10-11

VER (Lectio)
Meditamos la primera lectura del domingo siguiente. En este texto descubrimos el anuncio de un personaje enviado para sanar los corazones. Con ello anuncia la venida de Jesús, quien en la sinagoga de Nazaret (Lucas 4, 18-19) proclamará esta profecía, aplicándoselo a sí mismo. El Mesías que esperamos es quien viene para sanar y curar.


JUZGAR (meditatio):
He aquí el retrato no sólo de Jesucristo, sino a través de Él por tu bautismo, de todo monitor y educador junior. Tú has sido ungido por el Espíritu para darte a los demás, acercándote a quienes sufren, los que nada tienen y esperan de ti la buena noticia del Evangelio, tantas personas que andan por la vida con el corazón desgarrado, cautivos de su pecado, su egoísmo, sus pasiones y cuanto esclavizan al ser humano, prisioneros de sus vicios y de las circunstancias a las que no encuentran salida. Tú estás llamado a ir a anunciar a Jesús que es la Buena noticia, el médico que cura, el liberador que libera de la prisión. ¿Vives así tu ser junior?
Avanza en el texto. Por el bautismo Dios te ha vestido un traje de gala, simbolizado en la vestidura blanca o capa blanca e incluso en la misma pañoleta. Ella es tu traje de gala, que representa tu ser junior y el crismón es tu corona. ¿Cómo viviste el día de la imposición del crismón y la pañoleta? ¿Cambió en algo tu vida?

ACTUAR (oratio):
Simplemente reza y cuéntaselo a él.

Tiempo de adviento. Viernes II.


Oración:
Tomo conciencia de hallarme en presencia de Dios, fijando la mirada en una estampa o cerrando los ojos. Me signo mientras rezo la siguiente oración, consciente de mi incapacidad para orar:
Dios mío, ven en mi auxilio. Señor, date prisa en socorrerme.

Texto bíblico:
Así dice el Señor, tu libertador,
el Santo de Israel: Yo, el Señor tu Dios,
te instruyo por tu bien, te marco el camino a seguir.
¡Ojalá hubieras atendido mis mandatos!
Tu bienestar sería como un río;
tu prosperidad, como las olas del mar;
tu descendencia sería como la arena;
como sus granos, el fruto de tus entrañas;
tu nombre no habría sido borrado
ni apartado de mi presencia.
Isaías 48, 17-19

VER (Lectio)
El Segundo Isaías, continuador del primer profeta, hace un balance de la historia pasada de la Alianza, el pacto entre Dios y su pueblo. En ella Israel no escuchó la Palabra divina, provocando el castigo, es decir, la caída de Jerusalén y exilio en Babilonia. Pero Dios da nuevamente su Palabra e invita a escucharla, pues sólo así Israel será un pueblo próspero.

JUZGAR (meditatio):
La historia de Israel va más allá de la historia de un pueblo concreto, es nuestra propia historia, la tuya. Así ¿cuántas veces no has escuchado a Dios? ¿Qué te dice Él?

ACTUAR (oratio):
¿Qué le dices tú?

Tiempo de Adviento. Jueves II.


Oración:
Tomo conciencia de hallarme en presencia de Dios, fijando la mirada en una estampa o cerrando los ojos. Me signo mientras rezo la siguiente oración, consciente de mi incapacidad para orar:
Dios mío, ven en mi auxilio. Señor, date prisa en socorrerme.

Texto bíblico:
Porque yo, el Señor, tu Dios
te agarro de la diestra,
y te digo: No temas,
yo mismo te auxilio.
No temas, gusanito de Jacob,
oruga de Israel,
-oráculo del Señor-,
tu redentor es el Santo de Israel.
Mira, te convierto en trillo aguzado,
nuevo, dentado:
trillarás los montes y los triturarás,
convertirás en paja las colinas;
los aventarás,
y el viento los arrebatará,
el vendaval los dispersará;
y tú te alegrarás con el Señor,
te gloriarás del Santo de Israel.
Los pobres y los indigentes
buscan agua, y no la hay;
su lengua está reseca de sed.
Yo, el Señor, les responderé;
yo, el Dios de Israel,
no los abandonaré.
Alumbraré ríos en las dunas;
en medio de las vaguadas,
manantiales;
transformaré el desierto en estanque
y el yermo en fuentes de agua;
pondré en el desierto cedros,
y acacias, y mirtos, y olivos;
plantaré en la estepa cipreses,
junto con olmos y alerces.
Para que vean y conozcan,
reflexionen y aprendan de una vez
que la mano del Señor lo ha hecho,
que el Santo de Israel lo ha creado.
Isaías 26, 1-6

VER (Lectio)
El profeta recuerda al pueblo que puede y debe contar con el Señor, quien quiere salvarlo de sus enemigos y llenarlo de gozos. Pero para ello el pueblo debe de ser humilde y reconocerse pequeño ante Dios, “gusanito y oruga”, mísero y sediento que busca en vano el agua para calmar su sed en los dioses paganos. La confianza en Dios es fundamental. Es Él quien sacia la sed y transforma el yermo en fuentes de agua.

JUZGAR (meditatio):
Lee el texto y personifica esta profecía: tú eres el gusanito de Jacob y la oruga de Israel, siente que eres así y estás en manos de Dios. Él te mira con amor y compasión. También tu buscas agua y no la encuentras, buscas la felicidad en tener cosas, en comprar y sin embargo nunca llegas a serlo. Escucha dirigida a ti esta profecía. Dios quiere transformar el yermo de tu vida en un manantial, tu egoísmo y tu vivir-solo-para-ti en amor y vivir-para-los-demás.

ACTUAR (oratio):
Siente, sobretodo siente la mano de Dios que te acaricia, como hacen los niños con los gusanos de seda. Confía en Él, espera en su promesa. Él puede tardar pero no miente. Su Palabra es la única Verdad que existe.

miércoles, 10 de diciembre de 2008

Tiempo de Adviento. Miércoles II


Oración:
Tomo conciencia de hallarme en presencia de Dios, fijando la mirada en una estampa o cerrando los ojos. Me signo mientras rezo la siguiente oración, consciente de mi incapacidad para orar:
Dios mío, ven en mi auxilio. Señor, date prisa en socorrerme.

Texto bíblico:
¿Con quién me asemejaréis?
¿Con quién me compararéis?
-dice el Santo-.
Alzad a lo alto los ojos y ved:
¿quién ha creado estas cosas?
El que saca a su ejército innumerable
y llama a cada cual por su nombre.
Gracias a su poder y a su energía,
no le falta ni uno.
¿Por qué dices, Jacob,
por qué andas hablando, Israel:
Mi comportamiento está oculto a Yahvé,
a Dios se le pasa mi derecho?
¿No lo sabes, no has oído
que Yahvé es un Dios eterno,
creador de los confines de la tierra?
No se cansa ni se fatiga,
su inteligencia es inescrutable.
Da vigor al hombre cansado,
acrecienta la energía del débil.
Los jóvenes se cansan, se fatigan,
los valientes tropiezan y vacilan,
pero a los que esperan en Yahvé
él les renovará el vigor:
subirán como con alas de águila,
correrán sin fatigarse
y andarán sin cansarse.
Isaías 40, 25-31


VER (Lectio):
Dejamos atrás el Primer Isaías y nos adentramos en el Segundo Isaías. Éste vive en el destierro de Babilonia. En el texto descubrimos por primera vez la afirmación del monoteísmo, en cuanto, la existencia de un único Dios que favorece a Israel. De la creación pasa a una relación personal marcada por la confianza y la entrega de Dios al ser humano, al que le ofrece fortaleza.
Será Jesús quien, como nos presenta el Evangelio, muestre de una forma total y plena la cercanía de Dios hacia el ser humano.

JUZGAR (meditatio):
En un campamento, en una noche estrellada contempla el firmamento. Para quienes vivían en tiempos de Isaías, los babilonios, las estrellas eran dioses, para el profeta, simbolizan los ejércitos de Yahvé, pues habitan en su mundo, el cielo. Recuerda esa noche, cuando en mitad de la montaña sentiste fascinación al contemplar las estrellas. ¿Quién las ha creado? Recuerda las montañas que os rodeaban, ¿quién las ha creado? Mírate, esa maravilla de organismo vivo, donde unas células nacen y otras mueren. Escuchaba ayer que en siete años todas nuestras células han cambiado y tú no te has muerto, eres otro y a la vez el mismo. ¿Quién hace posible que tu corazón lata y las células obedezcan las leyes?
¿Cuántas veces te has sentido cansado y sin vigor? Lee el texto, que sea la Palabra quien responda a tus cansancios, especialmente en el junior. Después de un curso duro, infructífero o de un campamento. Los últimos versículos te van a ayudar muchísimo a seguir en el junior, en la Iglesia, amando a Cristo y sirviendo al Reino de Dios. No estamos aquí por nosotros sino porque esperamos en Quién renovará el vigor y hará posible que subamos como con alas de águila, corramos sin fatigarnos y andemos sin cansarnos.

ACTUAR (oratio):

Si después de tres meses de curso estás cansado. Pídele a Dios que renueve en ti las ganas por seguir en el junior.

martes, 9 de diciembre de 2008

Tiempo de Adviento. Martes II


MARTES II T.A.

Oración:

Tomo conciencia de hallarme en presencia de Dios, fijando la mirada en una estampa o cerrando los ojos. Me signo mientras rezo la siguiente oración, consciente de mi incapacidad para orar:
Dios mío, ven en mi auxilio. Señor, date prisa en socorrerme.

Texto bíblico:
Pero Yahvé aguardará y se apiadará,
se pondrá en pie para perdonaros,
porque Dios de equidad es Yahvé:
¡dichosos todos los que en él esperan!
Gente de Sión asentada en Jerusalén,
ya no volveréis a llorar,
seguro que tendrá piedad de vosotros,
cuando oiga vuestro clamor;
en cuanto lo oyere, os responderá.
Ya no os dará el Señor
pan tasado y agua racionada.
Ya no se ocultará tu Maestro,
con tus ojos verá a tu Maestro.
Con tus oídos podrás oír
a tus espaldas estas palabras:
Ése es el camino, id por él,
ya sea a la derecha, ya a la izquierda.
Tendrás por impuro el revestimiento
de tus ídolos de plata
y el oro que adorna tus imágenes.
Los rechazarás como paño inmundo:
¡Sois basura!, les dirás.
Él dará lluvia a la semilla
que hayas sembrado en la tierra,
y la tierra te producirá grano
que será pingüe y sustancioso.
Aquel día pacerán tus ganados
en pastizal dilatado;
los bueyes y los asnos
que trabajan la tierra
comerán forraje fermentado,
aventado con bieldo y con pala.
Habrá sobre todo monte alto
y sobre todo cerro elevado
manantiales de aguas perennes,
el día de la gran matanza,
cuando caigan las fortalezas.
Será la luz de la luna
como la luz del sol meridiano,
y la luz del sol meridiano
será siete veces mayor
-con luz de siete días-,
el día que vende Yahvé
la herida de su pueblo
y cure la contusión de su golpe.

Isaías 30, 18-26

VER (Lectio)

Puesto que la liturgia de hoy nos propone la primera lectura del domingo, ya meditada, en este día meditamos la lectura del sábado de la primera semana. En ella el profeta dirigiéndose a la comunidad que ha experimentado momentos de gran tribulación y está reunida para el culto, desea reafirmarla en la eficacia de la oración dirigida a Dios. El hecho de orar no supone que éste preserve al pueblo de las dificultades, sino que en sus angustias experimentará al Dios del éxodo.
Así en el texto de hoy el profeta nos presenta a Dios como un Dios que perdona, al que el creyente puede ver y escuchar y un Dios que cuida de su pueblo, ofreciéndole lo necesario en una sociedad rural, cuya forma de subsistencia se basaba en la agricultura y ganadería.

JUZGAR (meditatio):
Haz el texto tuyo. La Palabra no es historia. Escrita en el pasado se dirige a tu presente para transformar tu futuro. Deja que resuene en tu interior. Abandónate en las manos de Dios que te habla.
A mí, en este tiempo de oración ha resonado con fuerza las siguientes frases: Yahvé se apiadará, se pondrá en pie para perdonaros; ya no volverás a llorar; tendrá piedad de vosotros; y especialmente con tus ojos verás a tu Maestro.
Me dirás que a Dios no se le puede ver. Pues sí, se le puede ver con tan sólo buscar en la profundidad de un icono bizantino o de una imagen a Dios, con cerrar los ojos y buscarlo. Porque ver no es sólo grabar en la imaginación una imagen, es contemplar la profundidad de lo que la imagen representa, el rostro representa. Los ojos son las ventanas desde las cuales irradiamos la luz que anida en nuestro interior, nuestra persona, mucho más que el cuerpo que la envuelve. Si en el amor humano ocurre, en Dios ocurre lo mismo. Al orar buscamos penetrar en la profundidad de Dios, de su ser.
Así pues, lee el texto y deja que el Espíritu te guíe por donde Él quiera, desde la libertad que tiene el Espíritu. Y sino sientes nada, tranquilo. Es el Espíritu quien te lleva y Él es libre para que sientas o no sientas, lo importante es orar y ser como la tierra que espera día y noche la lluvia que la fecunde y haga reverdecer los árboles que en ella han sido plantados.

ACTUAR (oratio):
Y ahora, háblale. ¿Qué? Lo que te dicte el corazón. Nadie puede interferirse entre dos personas que se aman. Deja que sea tu corazón quien libremente hable a Dios.

lunes, 8 de diciembre de 2008

Tiempo de Adviento: Lunes II


II SEMANA DE ADVIENTO.

LUNES.

Oración:

Tomo conciencia de hallarme en presencia de Dios, fijando la mirada en una estampa o cerrando los ojos. Me signo mientras rezo la siguiente oración, consciente de mi incapacidad para orar:
Dios mío, ven en mi auxilio. Señor, date prisa en socorrerme.

Texto bíblico
Que se alegren desierto y sequedal,
que se regocije y florezca la estepa.
Que estalle en flores y se regocije,
que lance gritos de júbilo.
Le va a ser dada la gloria del Líbano,
el esplendor del Carmelo y del Sarón.
Podrá verse la gloria de Yahvé,
el esplendor de nuestro Dios.

Fortaleced las manos débiles,
afianzad las rodillas vacilantes.
Decid a los de corazón inquieto:
¡Sed fuertes, no temáis!
Mirad que llega vuestro Dios vengador,
Dios que os trae la recompensa;
él vendrá y os salvará.

Entonces se abrirán los ojos del ciego,
las orejas de los sordos se destaparán.
Entonces saltará el cojo como ciervo,
la lengua del mudo gritará de júbilo.
Pues manarán aguas en el desierto
y correrán torrentes por la estepa;
la paramera se trocará en estanque,
y el país árido en manantial de aguas.
En la guarida de los chacales
verdeará la caña y el papiro.
Habrá allí una senda purificada,
que la llamarán Vía Sacra;
no pasará el impuro por ella,
ni los necios por ella vagarán.
No habrá leones en ella,
ni por ella subirá bestia salvaje;
los rescatados la recorrerán.
Los redimidos de Yahvé volverán,
entrarán en Sión entre aclamaciones:
precedidos por alegría eterna,
seguidos de regocijo y alegría.
¡Adiós, penas y suspiros!
Isaías 2, 1-5

Lectio (¿qué dice el texto?)
La primera parte del Adviento es la invitación a vivir desde la esperanza en la actuación de Dios. De forma poética el autor describe el gozo por su presencia. Dios va a venir para transformar el desierto físico en un monte frondoso. Su poder abarca la naturaleza y las personas. Así ocurrirá con la llegada de Cristo. En él Dios transforma el desierto de nuestra vida, lo hace florecer y lo llena de torrentes, fortaleciendo nuestra persona vacilante.

Meditatio (¿qué me dice el texto?)
En este texto puedes descubrir tu vida: piensa en los momentos de “bajón”, cuando parece que todo va mal, que en ti sólo hay sequedad, soledad, vacío interior, cansancio, desánimo,... Y léelo, Dios no te deja sólo. Por eso comienza preguntándote por tus desiertos y a continuación lee este texto. Ante tu pecado, la única palabra que Dios tiene es de aliento. Él viene a fortalecer tus manos débiles, incapaces muchas veces de compartir y ayudar, tus rodillas vacilantes en el camino hacia Jesús, en tu caminar siguiendo el Evangelio, tu corazón inquieto que busca la felicidad fuera de la Iglesia, de Jesús, de Dios. ¿Qué te dice Dios?

Oratio:

Estas cara a cara con Quien habita en tu corazón. ¿Qué le dices después de haber leído y meditado su Palabra?

sábado, 6 de diciembre de 2008

Tiempo de Adviento: Sábado I


SÁBADO I TA..

Oración:

Tomo conciencia de hallarme en presencia de Dios, fijando la mirada en una estampa o cerrando los ojos. Me signo mientras rezo la siguiente oración, consciente de mi incapacidad para orar:
Dios mío, ven en mi auxilio. Señor, date prisa en socorrerme.

Texto bíblico:
Consolad, consolad a mi pueblo
-dice vuestro Dios -.
Hablad al corazón de Jerusalén
y decidle bien alto
que ya ha cumplido su servidumbre
ya ha satisfecho por su culpa,
pues ha recibido de mano de Yahvé
castigo doble por todos sus pecados.
Una voz clama:
Abrid en el desierto
un camino a Yahvé,
trazad en la estepa
una calzada recta a nuestro Dios.
Que todo valle sea elevado,
y todo monte y cerro rebajado;
que lo escabroso se vuelva llano,
y las peñas planicie.
Se revelará la gloria de Yahvé,
y toda criatura a una la verá.
Pues la boca de Yahvé ha hablado.

[Una voz dice: ¡Grita!
Respondo: ¿Qué he de gritar?
-Que todo ser vivo es hierba
y todo su esplendor flor del campo.
La flor se marchita, se seca la hierba,
en cuanto le dé el viento de Yahvé
(pues, cierto, hierba es el pueblo).
La hierba se seca, la flor se marchita,
mas la palabra de nuestro Dios
permanece por siempre]

Súbete a un monte elevado,
alegre mensajero para Sión:
clama con voz poderosa,
alegre mensajero para Jerusalén.
Clama sin miedo;
di a las ciudades de Judá:
Ahí está vuestro Dios.
Aquí llega el Señor Yahvé con poder,
su brazo lo sojuzga todo;
vedlo, su salario le acompaña,
su paga le precede.
Como pastor pastorea su rebaño:
recoge en brazos los corderitos.
los lleva en su regazo,
y trata con cuidado a las paridas.

Isaías 40, 1-11

VER (Lectio)
Entre corchetes se hallan los versos que omite la liturgia. Este sábado meditamos la primera lectura del domingo I.
El contexto histórico es el final del destierro. El profeta continuador de la obra de Isaías, llamado Deuteroisaías, anuncia el final del destierro. El pecado de Israel, la infidelidad a Yahvé que lleva a la injusticia hacia las clases más pobres, ha traído consigo el castigo de la destrucción de Jerusalén y el destierro en Babilonia. Es allí donde el profeta anuncia el fin de este castigo. Dios va a consolar a su pueblo, enviando un personaje anónimo que clamará en el desierto e invitará a abrir el corazón al Dios que viene.
Los evangelios dieron nombre a este profeta: Juan el Bautista, quien en el desierto anuncia la llegada de Jesucristo.
El Evangelio nos presenta el cumplimiento de esta profecía, así los ciegos reciben de Dios la vista. http://www.evangeli.net/

JUZGAR (meditatio):
Piensa en tu pecado, las consecuencias y el gozo que te produce sentir la cercanía de un Dios que te consuela. Escucha en el desierto de tu corazón la voz de la Palabra que grita allí. Es momento de personalizar este texto, hacerlo tuyo.

ACTUAR (oratio):

Repite la frase que más te ha llamado la atención o te está ayudando en este tiempo de oración y dirígela a Dios con tus palabras.

viernes, 5 de diciembre de 2008

Tiempo de Adviento. Viernes I



JUEVES I TA.

Oración:
Tomo conciencia de hallarme en presencia de Dios, fijando la mirada en una estampa o cerrando los ojos. Me signo mientras rezo la siguiente oración, consciente de mi incapacidad para orar:
Dios mío, ven en mi auxilio. Señor, date prisa en socorrerme.

Texto bíblico:

¿A caso no falta sólo un poco
para que el Líbano se haga un vergel,
y el vergel sea considerado una selva?
Aquel día los sordos oirán
las palabras de un libro,
y desde la tiniebla y desde la oscuridad
los ojos de los ciegos las verán.
Otra vez la gente humilde
volverá a alegrarse en Yahvé,
y los hombres más pobres
se regocijarán en el Santo de Israel.
Pues se habrán terminado los tiranos,
habrán acabado los hombres cínicos,
exterminados los que desean el mal:
los que declaran culpable a otro,
tienden lazos al que juzga en la puerta
y desatienden al justo por una nonada.
Por tanto, así dice Yahvé,
Dios de la casa de Jacob,
el que rescató a Abrahán:
No se avergonzará en adelante Jacob
ni en adelante su rostro palidecerá;
pues cuando vea a sus hijos,
las obras que haré con él,
santificará mi Nombre.
Santificará al Santo de Jacob
y respetará al Dios de Israel.
Los descarriados sabrán comprender,
el murmurador aprenderá la lección.
Isaías 29, 17-24

VER (Lectio)

En este himno descubrimos el poder transformador de Dios. El profeta anuncia los tiempos mesiánicos que comenzarán con la venida de Jesús. Serán desde Jesús cuando comience a cumplirse esta profecía. En ella la naturaleza, marcada por la agresividad del desierto, especialmente en la tierra donde vive Isaías, rodeada por grandes desiertos, se transformará en el lugar ideal para toda persona que vive allí, en una selva. Por otra parte los ciegos y sordos podrán escuchar y contemplar a Dios y en tercer lugar los humildes y pobres se alegrarán por la presencia de Yahvé, mientras los tirános serán destruidos. Éstos se caracterizan por hacer el daño y practicar la injusticia.
El Evangelio nos presenta el cumplimiento de esta profecía, así los ciegos reciben de Dios la vista. http://www.evangeli.net/

JUZGAR (meditatio):
Personaliza esta profecía: el Líbano eres tú, que vives rodeado de los desiertos del pecado, el egoísmo, la mentira y la hipocresía. Por ti mismo no puedes transformar el desierto en selva. Es Dios quien en la oración, en este tiempo de Adviento y el día de Navidad va a transformar tu Líbano en una selva. Siente esta esperanza. Dios cambiará tu corazón de piedra, incapaz de dar vida, por un corazón de tierra fértil. También tú eres sordo y ciego, pues te cuesta escuchar la Palabra de Dios y muchas veces cuando por una de estas vas a misa, no te enteras de las lecturas que los lectores y el sacerdote han proclamado. Vives sordo a Dios que te habla en tu corazón. Y vives ciego, pues no le ves en la Eucaristía, el sacramento de la Reconciliación y los hermanos, especialmente los más pobres. Pero tranquilo. Dios no te acusa, al contrario, te ofrece una Palabra de esperanza. Si eres humilde y te reconoces necesitado de Dios llegarás a alegrarte en él que como a los ciegos del Evangelio, te dará la vista y podrás verle y escucharle y sentir que a través de su Palabra, la Eucaristía, los sacramentos y los demás, te habla al corazón.
En la convivencia te encontraste con la realidad de la pobreza, gracias a los powerpoint. ¿Qué hace Dios? La respuesta la tienes aquí. Ante el dolor y la injusticia Dios nos ofrece una palabra.

ACTUAR (oratio):
Si no sabes que decirle, simplemente repite la exclamación de los ciegos: Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí.

jueves, 4 de diciembre de 2008

Tiempo de Adviento: Jueves I



JUEVES I TA..

Oración:
Tomo conciencia de hallarme en presencia de Dios, fijando la mirada en una estampa o cerrando los ojos. Me signo mientras rezo la siguiente oración, consciente de mi incapacidad para orar:
Dios mío, ven en mi auxilio. Señor, date prisa en socorrerme.

Texto bíblico:
Aquel día se entonará este cantar
en tierra de Judá:
Ciudad fuerte tenemos;
murallas y antemuro la protegen.
Abrid las puertas,
que entre gente fiel,
que guarda la lealtad.
Su ánimo es firme,
atesora la paz,
porque en ti confió.
Confiad siempre en Yahvé,
pues Él es nuestra roca eterna:
derrocó a los habitantes de las alturas,
la hizo caer por tierra,
la obligó a morder el polvo.
La pisotean los pies de los pobres,
las pisadas de la gente humilde.
Is 26, 1-6

VER (Lectio):


Dos ciudades se contraponen en este texto: Jerusalén y la villa inaccesible. La primera es la ciudad fortificada por Dios, donde se refugian los justos, la gente fiel que guarda lealtad, es la ciudad que atesora paz pues confía en Dios. El Adviento es una invitación a salir de nuestra villa inaccesible, la que se apoya sobre la arena de los propios intereses, pues un día será destruida por el mismo Dios. Es una invitación a marchar hacia la Jerusalén edificada sobre la roca de la Palabra de Dios, es decir, a entrar en la Iglesia, que se concreta en las parroquias, el movimiento junior y todos los grupos cristianos. Ella es la Jerusalén que se apoya en Jesús, la roca eterna.
En el Evangelio de hoy Jesús nos ofrece el significado profundo de esta profecía, invitándonos a construir nuestra vida sobre la roca de la fe. http://www.evangeli.net/


JUZGAR (meditatio):


Contempla esta ciudad y medita sus rasgos: se apoya en Jesús y en su Palabra, en los sacramentos, en el mandamiento del amor, en la oración y el compromiso cristiano. ¿En qué ciudad vivo? ¿en la villa inaccesible que sólo piensa en él mismo y se olvida de los demás?, ¿busco esta ciudad que se apoya en Dios?, ¿cuál me parece más atractiva? Como junior, ¿construyes tu vida en la roca de Jesús?, ¿es el junior un grupo que te ayuda a vivir la fe, apoyada en los valores de Jesús?

ACTUAR (oratio):


Pídele a Dios que te ayude a buscar esta ciudad y a construir tu vida sobre ella.

miércoles, 3 de diciembre de 2008

Tiempo de Adviento: Miércoles I.




Oración:


Tomo conciencia de hallarme en presencia de Dios, fijando la mirada en una estampa o cerrando los ojos. Me signo mientras rezo la siguiente oración, consciente de mi incapacidad para orar:
Dios mío, ven en mi auxilio. Señor, date prisa en socorrerme.

Texto bíblico:
Preparará Yahvé Sebaot
para todos los pueblos en este monte
un convite de manjares enjundiosos,
un convite de vinos generosos:
manjares sustanciosos y gustosos,
vinos generosos, con solera.
Rasgará en este monte
el velo que oculta a todos los pueblos,
el paño que cubre a todas las naciones;
acabará para siempre con la Muerte.
Enjugará el Señor Yahvé
las lágrimas de todos los rostros,
y acabará con el oprobio de su pueblo
en toda la superficie del país.
Lo ha dicho Yahvé.
Aquel día se dirá:
Aquí tenemos a nuestro Dios:
esperamos que él nos salvará;
él es Yahvé, en quien esperábamos:
celebremos con alegría su victoria.
La mano de Yahvé reposa en este monte.
Isaías 6,1-10ª


VER (Lectio):

Comienza esta profecía con la imagen del banquete. En ella Isaías anuncia el fin del mundo y lo describe como victoria de Dios sobre los poderes que esclavizan al ser humano. El lugar del banquete es simbólico: Sión, es decir, Jerusalén. En el banquete el rey, siguiendo la costumbre de los reyes entronizados, ofrece a sus invitados tres regalos: su manifestación a los pueblos que caminaban como ciegos, la destrucción de la muerte y el consuelo a los que sufren.
Esta profecía no se apoya en una ilusión personal del profeta sino en la Palabra de Dios.
Por tanto en este tiempo de la esperanza, apoyados en la Palabra de Dios, que hemos escuchado, nuestra mirada se dirige a Belén. Allí, el día de la Navidad, Dios se manifestará a todos los pueblos, a los judíos (María, José, los pastores, Simeón y Ana) y a los extranjeros (los magos) e invitará a todos los pueblos a un banquete, el cual tendrá lugar en la Última Cena y tiene lugar cada día en la eucaristía. En él Jesús ofrece a todos los pueblos el manjar suculento de su cuerpo y el vino generoso de su sangre. En la Navidad Dios viene a su pueblo para arrancar de él el paño que cubre sus rostros, la muerte. Ella anuncia la victoria de Jesús sobre el pecado y la muerte, causa del sufrimiento humano, en la Cruz y Resurrección. Dios viene a estar cerca del ser humano, a compadecerse de todos, como lo hará Jesús en su vida pública, resucitando a los muertos, curando a los enfermos, llorando con los que lloran, apiadándose de los pecadores.
El final de la profecía resume quien es Aquél a quien esperamos: el que nos salva.
Así pues, lee el texto detenidamente, teniendo presente esta explicación.

JUZGAR (meditatio):
Ilumina tu vida con esta palabra: encuentra el significado de la eucaristía en los primeros versos, como un banquete al que Dios te invita para alimentarte con el vino generoso de su Palabra y el manjar sustancioso de su Cuerpo. Siembra en ti deseos de estar con él, de asistir a la misa de los domingos para poder alimentar tu persona, pues tú también tienes hambre, hambre de la Palabra que de sentido a tu vida y te la llene, hambre de la presencia de Cristo en tu interior, que sacie tu ansia de amor.
Como Junior vives cerca de Jesús. ¿Lo sientes dentro y sientes que Él es quien aparta de ti toda desesperanza, quien abre el horizonte de tu vida más allá de la muerte y te conforta en los momentos de tristeza? Recuerda aquellas situaciones donde te sentiste hundido o hundida, donde estabas bajo de moral, y sin embargo fuiste capaz de levantarte porque sentías a Dios cerca.

ACTUAR (oratio):

Reza desde lo que ahora te pasa o cuéntale lo que has sentido al leer y meditar esta profecía.

martes, 2 de diciembre de 2008

Tiempo de Adviento: Martes I



Oración:
Tomo conciencia de hallarme en presencia de Dios, fijando la mirada en una estampa o cerrando los ojos. Me signo mientras rezo la siguiente oración, consciente de mi incapacidad para orar:
Dios mío, ven en mi auxilio. Señor, date prisa en socorrerme.

Texto bíblico:


Dará un vástago el tronco de Jesé,
un retoño de sus raíces brotará.
Reposará sobre él
el espíritu de Yahvé:
espíritu de sabiduría e inteligencia,
espíritu de consejo y fortaleza,
espíritu de ciencia y temor de Yahvé.
Y se inspirará en el temor de Yahvé.
No juzgará por las apariencias,
ni sentenciará de oídas.
Juzgará con justicia a los débiles,
con rectitud a los pobres de la tierra.
Herirá al hombre cruel
con la ara de su boca,
con el soplo de sus labios
matará al malvado.
Justicia será el ceñidor de su cintura,
verdad el cinturón de sus lomos.
Serán vecinos el lobo y el cordero,
y el leopardo se echará con el cabrito,
el novillo y el cachorro pacerán juntos,
y un niño pequeño será su pastor.
La vaca y la osa pacerán,
juntas acostarán sus crías,
el león, como los bueyes, comerá paja.
Hurgará el niño de pecho
en el agujero del áspid,
y en la hura de la víbora
el recién destetado meterá la mano.
Nadie hará daño, nadie hará mal
en todo mi santo Monte,
porque la tierra estará llena
de conocimiento de Yahvé,
como las aguas colman el mar.
Isaías 11, 1-10

VER (Lectio):

Nos encontramos en el Adviento, el tiempo de la espera y la esperanza. Y hoy nuestra madre la Iglesia nos alimenta a nosotros, sus hijos, con esta Palabra. La Biblia de Jerusalén afirma de este texto ser un poema mesiánico que concreta algunos rasgos esenciales del Mesías futuro: linaje davídico, lleno del espíritu profético, hará que reine entre los hombres la justicia, reflejo de la santidad de Yahvé y capaz de restablecer la paz paradisíaca, fruto del conocimiento de Yahvé.
En el primer verso nos indica el origen de este Mesías: Jesé, es decir, el padre de David y antepasado de todos los reyes de Judá y del Mesías, en cuanto es hijo adoptivo de José. Seguidamente nos indica uno de los rasgos más importantes del Mesías y por tanto de Jesucristo: posee el espíritu de Yahvé, es decir, la Rúaj, en hebreo género femenino, es la soplo de Dios que se cernía sobre el caos antes de la creación, dando vida a todos los seres, que suscitó a los Jueces e inspiró a los profetas (Moisés, Elías,...). Es ella quien da al Mesías y por tanto a Jesús las virtudes de sus grandes antepasados: la sabiduría e inteligencia de Salomón, la prudencia y bravura de David, el conocimiento y el temor de Yahvé de los Patriarcas (Jacob y Abraham) y de los profetas (Moisés). Posteriormente estas virtudes fueron tomadas por la Iglesia y llamadas los Siete Dones del Espíritu Santo, al que se añadió la piedad.
Por el texto ya conocemos la promesa de Dios de suscitar un Mesías y sus rasgos, sólo queda descubrir las consecuencias, lo que Él traerá. Frente a la rebelión del hombre contra Dios expuesta magistralmente en el pecado de Adán y Eva, y cuyas consecuencias son las guerras y la ruptura de la armonía entre el ser humano y la naturaleza, Dios va a enviar un Mesías que restaurará la paz y armonía con El, entre los hombres y éstos con la naturaleza.
Así pues, después de descubrir el significado del texto, léelo de nuevo, sin prisas, con pausas, disfrutando de cada frase.

JUZGAR (meditatio):


Ahora se trata de que juzgues tu vida a la luz de la Palabra de Dios. El tronco representa tu persona, herida por el pecado, incapaz de dar fruto. Es a ella a la que Dios se dirige y te promete brotará un esqueje, una pequeña ramita que se convertirá en un árbol. El poder de Dios es más grande que tu pecado. Piensa en ello, confía en él, siembra en tu corazón sentimientos de esperanza.
Compara las cualidades del Mesías con las tuyas como monitor o educador y tómalas como meta. Ahí tienes los rasgos de un buen junior, responsable de un centro o de un grupo, capaz de analizar los conflictos con profundidad, de actuar frente al niño que da problemas, no por la apariencia o lo que te dicen los demás sino con justicia y rectitud.
En tu corazón y en el mío habitan juntos el lobo y el cordero, el leopardo y el cabrito, el novillo y el cachorro, la vaca y el oso, el león y el buey, el niño y la aspid. Ellos provocan en ti conflictos constantemente. Pon nombre a esos animales: la bondad y la tirantez, la calma y los nervios, los deseos de ser bueno y las cosas malas que haces, la paz y la agresividad,... Piensa en situaciones concretas, cuando el lobo ha herido al cordero, es decir, cuando te has dejado llevar por tu carácter, hiriendo la buena persona que hay en ti. Y después lee el texto. Un día habrá en tu interior la armonía que tanto deseas, la paz que añoras. Dios no quiere reprimir en ti lo negativo, sino encauzarlo. La represión en sí es mala y provoca enfermedades. El cristiano no reprime y cuando reprime acaba siendo una persona escrupulosa y amargada. El cristiano, con la ayuda de Dios, armoniza, es capaz de integrar la complejidad de sentimientos y energías interiores en un proyecto. Pídele a Dios que te ayude.

ACTUAR (oratio):

Aquí eres tú. Simplemente lo que te diga el corazón. Y si no te dice nada, permanece en silencio unos minutos. El amor necesita curtirse por el desierto y la aridez.

lunes, 1 de diciembre de 2008

Materiales para el Adviento


Textos en PDF:


Cuaderno de Propuestas Pastorales de la Archidiócesis de Valencia: este material se ha repartido a las parroquias



Lectio Divina para cada día del año. Tomo 1: es un buen libro en el cual se ofrece un amplio guión para rezar cada día, con comentarios a los textos bíblicos de la misa y reflexiones entorno a ellos.




Textos bíblicos, comentarios y textos sobre cada domingo de Adviento:


Significado del Adviento, catequesis y homilías de Juan Pablo II, Benedicto XVI, textos de los Santos Padres (los primeros escritores cristianos cuyos escritos son de gran importancia para todos los cristianos), escrito del gran teólogo protestante Karl Barth, ... Constituye un muy buen material por la abundancia y cálidad.



Javier Leoz: décalogos, celebraciones, power point,... este sacerdote nos ofrece abundante material y muy bueno. Muy interesante la Misa Familiar, por las propuestas que realiza (moniciones, peticiones, gestos,...)



El único problema de estos guiones es que son colgados a finales de semana, pero para preparar la misa del domingo están muy bien trabajados, teniendo como referencia la pastoral de los salesianos:




Un buen folleto preparado por los franciscanos de Santo Espíritu del Monte (Gilet):



El dibujo del domingo, procedente de la Diócesis de Málaga, siempre es muy ilustrativo, especialmente de cara a los niños:



Interesante estos dibujos de los marianistas:




Los dibujos de esta web son muy buenos:



Tiempo de Adviento: Lunes I


Oración:
Tomo conciencia de hallarme en presencia de Dios, fijando la mirada en una estampa o cerrando los ojos. Me signo mientras rezo la siguiente oración, consciente de mi incapacidad para orar:
Dios mío, ven en mi auxilio. Señor, date prisa en socorrerme.

Texto bíblico (se tomará de la Biblia de Jerusalén):
Visión que tuvo Isaías, hijo de Amós, tocante a Judá y Jerusalén.

Sucederá en los días futuros
en el monte de la casa de Yahvé
se afianzará en la cima de los montes,
se alzará por encima de las colinas.
Confluirán a él todas las naciones,
acudirán pueblos numerosos.
Dirán:
-Venid, subamos al monte de Yahvé,
a la Casa del Dios de Jacob,
para que él nos enseñe sus caminos
y nosotros sigamos sus senderos.
Pues de Sión saldrá la Ley,
de Jerusalén la palabra de Yahvé.
Juzgará entre las gentes,
será árbitro de pueblos numerosos.
Forjarán de sus espadas azadones,
y de sus lanzas podaderas.
No levantará la espada
nación contra nación,
ni se ejercitarán más en la guerra.
Adelante, Casa de Jacob,
caminemos a la luz de Yahvé.
Isaías 2, 1-5

Lectio (¿qué dice el texto?)
Comenzamos el adviento y la Iglesia nos propone este canto de esperanza, en el que el profeta Isaías nos ofrece una mirada creyente sobre el curso de la historia humana, para él no camina hacia una catástrofe sino hacia el don divino de la paz universal.
En este poema Dios y la humanidad se encuentran. Dios baja al Monte Sión, es decir, a Jerusalén y todos los pueblos suben hacia la ciudad santa. Allí Él establece la “escuela de su Palabra”, capaz de transformar las energías del hombre, inclinadas al mal y a la muerte.
La profecía también es realista, pues se cumplirá al final de los tiempos. Lo importante es que la humanidad se encuentra en camino, en medio de las guerras, hambre y violencia, camina hacia la unidad.

Meditatio (¿qué me dice el texto?)


Lleva la Palabra de Dios a tu vida: en ti hay un deseo de buscar a Dios, en Quien se encuentra la felicidad absoluta. Mira en tu corazón. También tú quieres subir hacia el monte de la casa de Yahvé, deseas apartarte del mal y llevar una vida donde reine el amor. Tú y todos los que te rodean. Todos buscamos el bien, la verdad y el amor. En la humanidad hay unos ideales compartidos por todos los hombres y mujeres. Despierta en ti los deseos de Dios, de una ley que te despierte de tu mediocridad, que sea una luz capaz de desvelar tus pecados más profundos, tu egoísmo, tu falta de constancia en la oración, en el trabajo, en las relaciones con los demás.
El texto nos invita a la esperanza. De las espadas forjarán azadones y de las lanzas arados. ¿Cuáles son tus espadas y lanzas? De la madera de tu vida se pueden construir instrumentos destinados a la violencia o destinados a la paz. Son tus pensamientos, tus acciones, tus energías. ¿Hacia dónde las encaminas?, busca en tu interior las espadas y lanzas: los pensamientos, obsesiones, manías con las que interiormente hieres a los demás; las palabras, lanzas, que en medio de una conversación, dañan la imagen de las otras personas. Reconociendo tu pecado, siente la proximidad de Dios. Es verdad, por mucho que lo intentas no logras transformar las espadas y lanzas de tu agresividad en azadones y arados, por eso, mira a Dios. Es él, no tú quien transformará la violencia de tu interior en paz.
Pero todo ello no es por arte de magia, no es automático, sino a través de un largo caminar. El camino que has comenzado, hemos comenzado, con este año litúrgico, en este adviento.

Oratio:

Háblale de corazón a corazón y sino brotan en ti palabras, repite estas: ¡Ven, Señor! Transforma las lanzas y espadas, en azadones y arados.

Encontre de Monitors 29 y 30 de Novembre de 2008

Aci teniu l'enllaç en les fotos:
http://picasaweb.google.es/edumontcabrer/EncontreMonitoresJuniorsZonaMontcabrer#

domingo, 30 de noviembre de 2008

Domingo II de Adviento (7 de Diciembre)º

PRIMERA LECTURA.

Lectura del Profeta Isaías (Is 40, 1-5. 9-11)
Consolad,
consolad a mi pueblo,
dice vuestro Dios;
hablad al corazón de Jerusalén,gritadle:
que se ha cumplido su servicio,
y está pagado su crimen,
pues de la mano del Señor
ha recibido doble paga por sus pecados.

Una voz grita:
En el desierto preparadle
un camino al Señor;
allanad en la estepa
una calzada para nuestro Dios;
que los valles se levanten,
que los montes y colinas se abajen,
que lo torcido se enderece
y lo escabroso se iguale.
Se revelará la gloria del Señor,
y la verán todos los hombres juntos
—ha hablado la boca del Señor—.

Súbete a lo alto de un monte,
heraldo de Sión,
alza con fuerza la voz,heraldo de Jerusalén,
álzala, no temas,
di a las ciudades de Judá:
aquí está vuestro Dios.
Mirad: Dios, el Señor,
llega con fuerza,
su brazo domina.
Mirad: le acompaña el salario,
la recompensa le precede.
Como un pastor apacienta el rebaño,
su mano los reúne.
Lleva en brazos los corderos,
cuida de las madres.
Palabra de Dios

VER:
El pueblo de Israel ha estado sometido a Babilonia, sufriendo la deportación. Sin embargo esto cambia con la llegada de Ciro y el edicto

martes, 25 de noviembre de 2008

jueves, 20 de noviembre de 2008

Campanya Junior 2008

Taller de Oración. II. Día 4º. Levántate.


Día 4º.


Preparo el corazón.
Un paso o dos antes del lugar donde tengo que hacer la meditación, me pondré en pie, alzando el entendimiento hacia arriba, considerando como el Señor nuestro Dios me mira.
No estoy solo, Dios eres quien me miras y escuchas.

Escucho a Dios.

¡Álzate y brilla, que llega tu luz,
la gloria de Yahvé amanece sobre ti!
Mira: la oscuridad cubre la tierra,
y espesa nube a los pueblos,
más sobre ti amanece Yahvé
y su gloria sobre ti amanece.
Caminarán las naciones a tu luz,
los reyes al resplandor de tu aurora.
Alza los ojos entorno y mira:
todos se reúnen y vienen a ti;
tus hijos vienen de lejos,
y tus hijas son traídas en brazos.
Al verlo te pondrás radiante,
tu corazón se ensanchará estremecido,
pues vendrán a ti los tesoros del mar,
te traerán las riquezas de los pueblos.
Isaías 60, 1-5

Sigo escuchando.

VER: Jerusalén había sido destruida por el rey de Babilonia (Irak) Nabucodonosor y las clases dirigentes y cultas deportadas a esta ciudad. El profeta proclama un canto de esperanza dirigido a la ciudad desolada y abatida. Es Dios quien va a actuar. Después de sufrir el castigo por el pecado, Jerusalén volverá a llenarse de gente y todos los pueblos rendirán homenaje a esta ciudad. La profecía se cumplió con el nacimiento de Jesús, los Magos simbolizando a todos los pueblos llegan a Jerusalén con sus tesoros (oro, incienso y mirra), gentes de diversas lenguas se acercan al Cenáculo el domingo de Jerusalén. Y hoy en día Jerusalén recibe a cientos de miles de peregrinos procedentes de todo el mundo. En resumen, en la oscuridad Dios llega con su luz.

JUZGAR: lo primero que te dice el profeta es que te levantes. Acostados están los que duermen y los muertos. Así pues, escucha la voz de Dios y levántate. ¿De qué? de tus pocas ganas de rezar, de tus pensamientos egoístas, de tu comodidad, en definitiva de tu pecado que oscurece tu persona. Escucha su voz. La Palabra de Dios que has leído es el amanecer sobre ti, es la luz que brilla y llega a tu corazón, es la gloria que habita en ti. Por eso de nuevo mira tu situación presente, tus oscuridades, tu pecado y deja que Dios te ilumine. Dios no va a ti sólo cuando estás en los juniors, en un campamento o en una misa. Dios sale a tu encuentro en tu pecado, como hizo Jesús con muchas personas (Zaqueo, los ciegos, María Magdalena, Mateo,...), en el pecado también hay luz, el amor de Dios, el Dios que se acerca a ti para decirte, levántate. Piensa, analiza tu vida, ¿cuándo has pecado y has sentido que no estabas sólo, que Dios estaba junto a ti, advirtiéndote, amándote, y acogiéndote después, cuando te has sentido mal por una palabra inoportuna, un suspenso, una justa bronca de tus padres o una borrachera? Dios se acerca como luz, la luz que se concreta en unos valores, una vida libre de todo lo que te esclaviza (el sexo desenfrenado, el alcohol, el consumo excesivo de tabaco, la velocidad, la diversión sin límites, la lengua fanfarrona y murmuradora, los enfados,...). Por eso es tan importante la Biblia, de manera especial, la constante lectura del Evangelio, porque ella es la luz.

ACTUAR: háblale y repite alguna de las frases. ¿Hasta cuando? Ya sabes que San Ignacio recomendaba todos los días una hora de oración, si bien, como mínimo si quieres rezar de veras, pasando por supuesto por la aridez en forma de aburrimiento, tienes que procurar superar la media hora.

Y después...
En los momentos de “bajón” que puedes tener durante el día repite esta oración: ¡álzate y brilla que llega tu luz!

Texto base tomado de http://www.seminariomenorvalencia.com/

Taller de Oración. II. Día 3º. Nada nos separá del amor de Dios.




Día 3º.




Preparo el corazón.
Un paso o dos antes del lugar donde tengo que hacer la meditación, me pondré en pie, alzando el entendimiento hacia arriba, considerando como el Señor nuestro Dios me mira.
No estoy solo, Dios eres quien me miras y escuchas.

Escucho a Dios.



Por lo demás, sabemos que en todas las cosas interviene Dios para bien de los que le aman, de aquellos que han sido llamados según su designio. Pues Dios predestinó a reproducir la imagen de su Hijo a los que conoció de antemano, para que así fuera su Hijo el primogénito entre muchos hermanos. Y as los que predestinó, también los llamó; y a los que llamó, también los hizo justos: y a los que hizo justos, también los glorificó.
Ante esto, ¿qué podemos decir? Si Dios está por nosotros, ¿quién estará contra nosotros? Si Él no perdonó ni a su propio Hijo (antes bien lo entregó por todos nosotros), ¿cómo no va a darnos con él gratuitamente todas las cosas ¿Quién acusará a los elegidos de Dios? Dios es quien justifica. ¿Quién condenará? ¿Acaso Cristo Jesús, que murió, más aún, que resucitó, que está a la diestra de Dios y que intercede por nosotros?
¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿La tribulación?, ¿la angustia?, ¿la persecución?,¿el hambre?, ¿la desnudez?, ¿los peligros?, ¿la espada? Como dice la Escritura: Por ti nos matan cada día, nos tratan como a ovejas de matadero. Pero en todo esto salimos más que vencedores gracias a aquel que nos amó.
Pues estoy seguro que ni la muerte ni la vida, ni los ángeles ni los principados, ni lo presente ni lo futuro, ni las potestades, ni la altura ni la profundidad, ni cualquier otra criatura podrá separarnos del amor de Dios manifestado en Cristo Jesús Señor nuestro.
Rm 8, 28-39

Sigo escuchando.



VER: San Pablo fue una persona que se entregó totalmente al anuncio de Jesús y por ello sufrió azotes, cárcel y todo tipo de sufrimientos. En estas bellísimas líneas de la carta a los romanos resume lo que es el cristiano y por tanto el junior: una persona totalmente unida a Cristo que experimenta el amor de Dios, un amor que está por encima del propio pecado. Es la unión a Cristo la que hace posible pasar por todo tipo de pruebas.

JUZGAR: lee el texto desde tu momento presente. ¿Cómo te encuentras ahora de cara a Dios?, ¿frío, sin ganas de continuar en el junior y la Iglesia?, ¿cansado de que se te rían por ser junior?, ¿dudando acerca de la existencia de Dios?, ¿rebelde ante Dios porque no comprendes sus mandamientos? Dedica unos momentos a revisar tu estado actual: tus sentimientos, tus valores, tus ideas,... Ponte ante Dios y desnúdate ante Él. Dile, mira este soy yo, así, sin ninguna hoja de higuera que cubra tu persona, tal como eres. Después lee el texto, recuerda lo que muchas veces los juniors cantamos: “nada nos separará, nada nos separará del amor de Dios”. Dios nunca se separará de ti. Repite en tu interior alguna frase de las del texto. En mi oración me han ayudado las siguientes: sabemos que en todas las cosas interviene Dios para bien de los que le aman; si Dios está con nosotros, ¿quién estará contra nosotros?; ¿quién nos condenará?; ¿quién nos separará del amor de Cristo?; pues en todo esto salimos vencedores gracias al amor a aquel que nos amo.

ACTUAR: es el momento de rezar, puedes escribir una oración, repetir durante unos minutos la frase que más te halla llamado la atención y dejar que repose en tu interior, mirar una imagen de Jesús y permanecer en silencio. Actuar no significa sólo hacer algo, sino en cristiano actuar es dejar que el Espíritu Santo actúe en ti, en tu interior, es ser la roca que deja le acaricien las olas del mar. No se trata tanto de pensar como de amar, eso es lo más importante, amar y amar muchas veces no consiste en hacer sino en dejar que la persona amada te ame, en dejarse amar. Y esto en Dios también, pues no olvides, el amor humano tiene su origen en el Espíritu Santo. Si dos personas se aman es porque tienen dentro el Espíritu que les lleva a dar y entregarse. Los animales, en cuanto no tienen el Espíritu, son incapaces de amar como amamos las personas.


Y después...
En este día, cada vez que te ocurra algo, agradable y especialmente desagradable, repite en tu interior: “todo es para mi bien”

Texto base tomado de http://www.seminariomenorvalencia.com/