Lectura del libro de Nehemías 8, 2-4a.5-6.8-10.
En aquellos días, el día primero del mes séptimo, el sacerdote
Esdras trajo el libro de la ley ante la comunidad: hombres, mujeres y cuantos
tenía uso de razón. Leyó el libro en la plaza que está delante de la Puerta del
Agua, desde la mañana hasta el mediodía, ante los hombres, las mujeres y los
que tenían uso de razón. Todo el pueblo escuchaba con atención la lectura del
libro de la ley. El escriba Esdras se puso en pie sobre una tribuna de madera
levantada para la ocasión. Esdras abrió el libro en presencia de todo el
pueblo, de modo que toda la multitud podía verlo; al abrirlo, el pueblo entero
se puso de pie. Esdras bendijo al Señor, el Dios grande, y todo el pueblo
respondió con las manos levantadas:
-Amén, amén.
Luego se inclinaron y adoraron al Señor, rostro en tierra. Los
levitas leyeron el libro de la ley de Dios con claridad y explicando su
sentido, de modo que entendieran la lectura. Entonces el gobernador Nehemías,
el sacerdote y escriba Esdras, y los levitas que instruían al pueblo dijeron a
toda la asamblea:
-Este día está consagrado al Señor, vuestro Dios. No estéis
tristes ni lloréis.
(Y es que el pueblo lloraba al escuchar las palabras de la ley).
Nehemías les dijo:
-Id, comed buenos majares y bebed buen vino, e invitad a los que
no tienen nada preparado, pues este día está consagrado al Señor. ¡No os
pongáis tristes; el gozo del Señor es vuestra fuerza!
Textos
paralelos.
Y Esdras
leyó el libro de la Ley de Dios:
Esd 7, 6:
Era un letrado experto en la Ley que dio el Señor, Dios de Israel, por medio de
Moisés. El rey le concedió todo lo que pedía porque el Señor, su Dios, estaba
con él.
Esd 7, 25-26:
Tú, Esdras, con esa prudencia que Dios te ha dado, nombra magistrados y jueces que
administren justicia a todo tu pueblo de Transeufratina, es decir, a todos los
que conocen la Ley de tu Dios, y a los que no la conocen, enséñasela.
Esd 8, 3: Luego
entregaron los decretos del rey a los sátrapas imperiales y a los gobernadores
de Transeufratina, que ayudaron al pueblo y al templo de Dios.
Notas exegéticas.
8 Lógica y cronológicamente, Ne 8 es
continuación de Es 8, 36: Esdras había venido de Babilonia para promulgar la
Ley, Esd 7, 25-26. El Cronista se sirve aquí del informe de Esdras.
8 2 Con la fiesta del mes séptimo
(septiembre-octubre) se inauguraba antes del Destierro, el nuevo año.
8 5 Los vv. 5-8 ofrecen todos los
elementos de lo que será el servicio de la sinagoga, diferente del culto
celebrado en el templo, donde los sacrificios constituían el elemento
principal. Aquí no hay sacrificios. El servicio comprende fórmulas litúrgicas
con respuestas de los participantes, bendiciones, oración (con las manos hacia
el cielo), adoración (prosternación), lectura y explicación de la ley de Dios.
8 10 “Esdras leyó” griego, “y
leyendo” hebreo.
8 9 3 Esd omite “Nehemías”; griego,
omite 2el gobernador”. Estas menciones proceden del redactor.
Comentario Homilética.
-Segunda mitad del s. V:
Regreso del destierro en Babilonia.
Situación difícil a nivel material y espiritual.
Nehemías: remedia la situación material levantando las murallas de
Jerusalén.
Esdras, sacerdote y escriba enviado por el Imperio Persa: reforma
jurídica basada en la ley.
-Lectura de la Ley:
Configuración del judaísmo:
Raíz: Templo reconstruido y Ley leída y comentada.
Dimensión comunitaria.
Amén: aceptación.
Importancia de la interpretación de la Ley.
Litúrgica.
Fuente de vida.
Después: gran fiesta.
Salmo responsorial
Salmo 19 (18), 8-10.15.
Tus
palabras, Señor, son espíritu y vida. R/.
La
ley del Señor es perfecta
y
es descanso del alma;
el
precepto del Señor es fiel
e
instruye a los ignorantes. R/.
Los
mandatos del Señor son rectos
y
alegran el corazón;
la
norma del Señor es límpida
y
da a luz a los ojos. R/.
El
temor del Señor es puro
y
eternamente estable;
los
mandamientos del Señor son verdaderos
y
enteramente justos. R/.
Que
te agraden las palabras de mi boca,
y
llegue a tu presencia el meditar de mi corazón,
Señor,
Roca mía, Redentor mío. R/.
Textos
paralelos.
La ley de Yahvé es perfecta.
Sal 119, 129: Admirables son tus preceptos: por eso los observa mi
alma.
Notas exegéticas.
19 El himno celebra en Yahvé al
creador del cielo, especialmente del sol y , al autor de la Ley: la naturaleza y
la Ley manifiestan las perfecciones divinas. En el Antiguo Oriente, el sol era símbolo
de la justicia: así se explica la unión de las dos partes del salmo. La
liturgia de Navidad lo aplica al Verbo de Dios, Sol de Justicia.
19 15 (a) “sin tregua” griego, omitido
por hebreo.
19 15 (b) En hebreo goel. El
término, que designa al vengador de sangre y al redentor es aplicado por Job y
con frecuencia en la segunda parte de Isaías a Yahvé que venga, salva y arranca
de la muerte a sus fieles y a su pueblo.
Segunda
lectura.
Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios 12, 12-30.
Hermanos:
Lo mismo que el cuerpo es uno y tiene muchos miembros, y todos los
miembros del cuerpo, a pesar de ser muchos, son un solo cuerpo, así es también
Cristo. Pues todos nosotros, judíos y griegos, esclavos y libres, hemos sido
bautizados en un mismo Espíritu para formar un solo cuerpo. Y todos hemos
bebido de un solo Espíritu. Pues el cuerpo no lo forma un solo miembro, sino
muchos. Si dijera el pie: “Puesto que no soy mano, no formo parte del cuerpo”,
¿dejaría por eso de ser parte del cuerpo? Y si el oído dijera: “Puesto que no
soy ojo, no formo parte del cuerpo”, ¿dejaría por eso de ser parte del cuerpo?
Y si el cuerpo entero fuera ojo, ¿Dónde estaría el oído?”; si fuera todo oído,
¿dónde estaría el olfato? Pues bien, Dios distribuyó cada uno de los miembros
en el cuerpo como quiso. Si todos fueran un solo miembro; ¿dónde estaría el
cuerpo? Sim embargo, aunque es cierto que los miembros son muchos, el cuerpo es
uno solo. El ojo no puede decir a la mano: “No te necesito”; y la cabeza no puede
decir a los pies: “No os necesito”. Sino todo lo contrario, los miembros del
cuerpo que nos parecen más despreciables los rodeamos de mayor respeto; y los
menos decorosos los tratamos con más decoro; mientras que los más decorosos no
lo necesitan. Pues bien, Dios organizó el cuerpo dando mayor honor a lo que
carece de él, para que así no haya división en el cuerpo, sino que más bien
todos los miembros se preocupen por igual unos de otros. Y si un miembro sufre,
todos sufren con él; si un miembro es honrado, todos se alegran con él. Pues
bien, vosotros sois el cuerpo de Cristo y cada uno es su miembro. Pues en la Iglesia
Dios puso en primer lugar a los apóstoles; en segundo lugar, a los profetas; en
el tercero, a los maestros; después, los milagros; después el carisma de
curaciones, la beneficencia, el gobierno, la diversidad de lenguas. ¿Acaso son
todos apóstoles? ¿O todos son profetas? ¿O todos maestros? ¿O hacen todos
milagros? ¿Tienen todos don para curar? ¿Hablan todos en lenguas o todos las interpretan?
Textos
paralelos.
El cuerpo humano, aunque tiene muchos miembros,
es uno.
Rm 12, 4-5: Es como un cuerpo:
tenemos muchos miembros, no todos con la misma función; así, aunque somos
muchos, formamos con Cristo un solo cuerpo, y respecto a los demás somos miembros.
Forman un solo cuerpo.
Ef 4, 4-6: Uno es el cuerpo,
uno el Espíritu, como es una la esperanza a que habéis sido llamados, uno el
Señor, una la fe, uno el bautismo, un Dios, Padre de todos, que está sobre
todos, entre todos, en todos.
Así también es Cristo.
Ga 3, 28: Ya no se distinguen
judío y griego, esclavo y libre, hombre y mujer, pues con Cristo Jesús todos
somos uno.
Hemos sido todos
bautizados en un solo Espíritu.
Col 3, 11: En la cual no se
distingue griego y judío, circunciso e incircunciso, bárbaro y escita, esclavo
y libre, sino que Cristo lo es todo para todos.
Flm 16: Y no ya como esclavo,
sino mejor que esclavo: como hermano muy querido para mí y más aún para ti,
como hombre y como cristiano.
Todos los miembros se preocuparán
lo mismo.
Rm 12, 15: Con los alegres
alegraos, con los que lloran llorad.
Si un miembro es honrado.
1 Co 12, 7-11: A cada uno se le
da una manifestación del Espíritu para el bien común. Uno por el Espíritu tiene
el don de hablar con sabiduría, otro según el mismo Espíritu el hablar con
penetración, otro por el mismo Espíritu la fe, otro por el único Espíritu el
carisma de curaciones, otro realizar milagros, otro profecía, otro discreción
de espíritus, otro hablar lenguas diversas, otro interpretar lenguas arcanas.
Pero todo lo ejecuta el mismo y único Espíritu repartiendo a cada uno como
quiere.
Rm 12, 6-8: Usemos los dones
diversos que poseemos según la gracia que nos ha concedido: por ejemplo, la profecía
regulada por la fe, el servicio, para administrar; la enseñanza, para enseñar;
el que exhorta, exhortando; el que reparte, con generosidad; el que preside,
con diligencia; el que alivia, de buen humor.
Ef 4, 11: Él nombró a unos apóstoles,
a otros profetas, evangelistas, pastores y maestros.
Cada uno con una función particular.
Rm 1, 1: De Pablo, siervo de
Jesús Mesías, llamado a ser apóstol, reservado para anunciar la buena noticia
de Dios.
Hch 11, 27: Por aquel tiempo
bajaron unos profetas de Jerusalén a Antioquía.
Notas
exegéticas.
12 12 (a) Aunque utilice el apólogo clásico
que compara a la sociedad con un cuerpo que teniendo muchos miembros diversos
es uno, Pablo no se inspira en él para su doctrina sobre el Cuerpo de Cristo.
Esta brota más bien de su peculiar modo de entender el amor como la base de la
existencia humana. En efecto, él veía a los creyentes como partes de una unidad
orgánica, y el cuerpo humano le brindaba una imagen perfecta de la diversidad
articulada en la unidad. Él designa aquí a “Cristo” como la realidad que
corresponde a ese hombre nuevo. Como cuerpo suyo, la Iglesia es la presencia
física de Cristo en el mundo en la medida en que prolonga su ministerio. Esta doctrina,
de tan gran realismo, que ya aparece en 1 Co, se repite y amplia en las
epístolas de la cautividad. Es cierto que la reconciliación de los hombres, que
son miembros de Cristo se realiza siempre en el Cuerpo de Cristo, crucificado
según la carne y vivificado por el Espíritu. Pero la unidad de ese Cuerpo que
reúne a todos los cristianos en el mismo Espíritu y su identificación con la
Iglesia adquieren mayor relieve. Así personalizado este Cuerpo tiene en
adelante a Cristo por cabeza, por la influencia sin duda de la idea de Cristo
Cabeza de las potestades. Finalmente llega hasta englobar en cierto modo todo
el universo reunido bajo el dominio del Kyrios.
12 12 (b) Como el cuerpo humano da unidad
a la pluralidad de los miembros, así Cristo, principio unificador de la
Iglesia, da unidad a todos los cristianos en su cuerpo.
12 13 Literalmente este v. es un
paréntesis: no forma parte del relato-parábola, sino que ofrece una explicación
teológica que remite al bautismo y a la eucaristía. El primer miembro es
paralelo de 10, 2: todos quedaron vinculados a Moisés al ser bautizados en la
nube y en el mar. “Bebieron la misma bebida espiritual” era una alusión a la
eucaristía.
12 14 La primera parte de la parábola
del cuerpo (vv. 14-20a) desarrolla el tema de la necesaria diversidad.
12 20 La segunda parte de la parábola
(vv. 20b-26) desarrolla el tema de la solidaridad de los miembros del cuerpo,
que nada pueden los unos sin los otros. Al contrario, encuentran su alegría en
su unidad.
12 22 Pablo recuerda aquí seguramente
la existencia de cristianos llamados “débiles”, para los que reclamaba de forma
insistente el respeto de sus conciencias.
12 26 Con los verbos “sufrir” y “ser
honrado” (o glorificado) abandona Pablo el terreno del relato parabólico. En
efecto, estos verbos expresan en otros lugares la muerte y la resurrección de
Cristo.
12 28 (a) Los “maestros” estaban encargados
de la enseñanza regular y ordinaria.
12 28 (b) El don que mueve al cristiano a
las obras de caridad.
12 28 (c) El don de gobernar y regir las
iglesias.
Comentario Homilética.
-Analogía cuerpo – reflexión teológica
sobre Cristo y la Iglesia:
Unicidad y multiplicidad.
Distinción y complementariedad.
Humildad y necesidad.
-Comunidad de Corintio:
Tensiones entre los distintos miembros.
Evangelio.
X Lectura del
santo evangelio según san Lucas 1, 1-4; 4.14-21.
Ilustre Teófilo:
Puesto que muchos han emprendido la tarea de componer un relato de los hechos
que se han cumplido entre nosotros, como nos los transmitieron los que fueron
desde el principio testigos oculares y servidores de la palabra, también yo he
resuelto escribírtelos por su orden, después de investigarlo todo
diligentemente desde el principio, para que conozcas la solidez de las enseñanzas
que has recibido. En aquel tiempo, Jesús volvió a Galilea con la fuerza del
Espíritu; y su fama se extendió por toda la comarca. Enseñaba en las sinagogas,
y todos lo alababan. Fue a Nazaret donde se había criado, entró en la sinagoga,
como era su costumbre los sábados, y se puso en pie para hacer la lectura. Le
entregaron el rollo del profeta Isaías y, desenrollándolo, encontró el pasaje
donde estaba escrito: “El Espíritu del señor está sobre mí, porque él me ha
ungido. Me ha enviado a evangelizar a los pobres, a proclamar a los cautivos la
libertad, y a los ciegos, la vista; a poner en libertad a los oprimidos; a proclamar
el año de gracia del Señor”. Y, enrollando el rollo y devolviéndolo al que lo
ayudaba, se sentó. Toda la sinagoga tenía los ojos clavados en él. Y él comenzó
a decirles:
-Hoy se ha cumplido
esta escritura que acabáis de oír.
Textos
paralelos.
Los que desde el principio fueron testigos
oculares y servidores de la Palabra.
Jn 15, 27: Y también vosotros daréis
testimonio, porque habéis estado conmigo desde el principio.
Hch 1, 8: Pero recibiréis la
fuerza del Espíritu Santo que vendrá sobre vosotros, y seréis testigos míos en Jerusalén, Judea y
Samaría y hasta el confín del mundo.
He decidido yo también, después
de haber investigado.
Ef 3, 7: Y yo soy su ministro por
don de la gracia de Dios, otorgada según la eficacia de su poder.
Para que conozcas la solidez de
las enseñanzas que has recibido.
Hch 1, 1: En mi primera parte,
querido Teófilo, conté todo lo que Jesús hizo y enseñó, desde el principio.
Mc 1, 14-15.39 |
Mt 4, 12-17.23 |
Lc 4, 14-15 |
Cuando arrestaron
a Juan, Jesús se dirigió a Galilea a proclamar la buena noticia de Dios. Decía: -Se ha cumplido el
plazo y está cerca el reinado de Dios: arrepentíos y creed la buena noticia. Y fue predicando y
expulsando demonios en sus sinagogas por toda la Galilea. |
Al enterarse de
que Juan había sido arrestado, Jesús se retiró a Galilea, salió de Nazaret y
se estableció en Cafarnaún, junto al lago, en territorio de Zabulón y Neftalí.
Así se cumplió lo anunciado por el profeta Isaías: Territorio de Zabulón y
territorio de Neftalí, camino del mar, al otro lado del Jordán, Galilea de
los paganos. El pueblo que habitaba en tinieblas vio una luz intensa, a los
que habitaban en sombras de muerte les amaneció la luz. Desde entonces
comenzó a proclamar: -Arrepentíos, que
está cerca el reinado de Dios. Jesús recorría
toda Galilea enseñando en las sinagogas, proclamando la buena noticia del reino
y curando entre el pueblo toda clase de enfermedades y dolencias. |
Impulsado por el
Espíritu, Jesús volvió a Galilea, y su fama se extendió por toda la comarca. Enseñaba en sus
sinagogas, respetado de todos. |
Iba enseñando por las sinagogas.
Mt 3, 16: Jesús se bautizó, salió
del agua y al punto se abrió el cielo y vio al Espíritu de Dios que bajaba como
una paloma y se posaba sobre él.
Lc 4, 44: Y predicaba en las
sinagogas de Judea.
Mc 6, 1-6 |
Mt 13, 53-58 |
Lc 4, 16-21 |
Saliendo de allí,
se dirigió a su ciudad, acompañado de sus discípulos. Un sábado se puso a
enseñar en la sinagoga. La multitud que lo
escuchaba comentaba asombrada: -¿De dónde saca
este todo eso? ¿Qué clase de saber se le ha dado, que tales milagros realiza
con sus manos? ¿No es este el carpintero, el hijo de María, el hermano de
Santiago y José, Judas y Simón? ¿No viven aquí, entre nosotros, sus hermanas?
Y esto lo sentían como un obstáculo. Jesús les decía: -A un profeta lo
desprecian solo en su patria, entre sus parientes y en su casa. Y no podía hacer
allí ningún milagro, salvo unos pocos enfermos a quienes les impuso las manos
y curó. Y se extrañó de su incredulidad. Después recorría
las aldeas del contorno enseñando. |
Cuando Jesús terminó
etas parábolas, se marchó de allí, se dirigió a su ciudad y se puso a
enseñarles en su sinagoga. Ellos preguntaban
asombrados: -¿De dónde saca
este su saber y sus milagros? ¿No es este el hijo del artesano?, ¿no se llama
su madre María y sus hermanos Jacobo, José, Simón y Judas? Sus hermanos ¿no
viven entre nosotros? ¿De donde saca todo eso? Y lo sentían como un
obstáculo. Jesús les dijo: -A un profeta lo
desprecian solo en su patria y en su casa. Y, por su incredulidad, no hizo allí
muchos milagros. |
Fue a Nazaret,
donde se había criado, y según su costumbre entró en sábado en la sinagoga y
se puso en pie para hacer la lectura. Le entregaron el rollo del profeta Isaías.
Lo desenrolló y dio con un texto que dice: El Espíritu del señor sobre mí, porque
él me ha ungido para que dé la buena noticia a los pobres; me ha enviado a
anunciar la libertad a los cautivos y la vista a los ciegos, para poner en
libertad a los oprimidos, para proclamar el año de gracia del Señor. Lo enrolló,
se lo entregó al empleado y se sentó. Toda la sinagoga
tenía los ojos fijos en él. Él empezó diciéndoles: -Hoy, en presencia
vuestra, se ha cumplido esta escritura. Todos lo
aprobaban, admirados de aquellas palabras sobre la gracia que salían de su
boca. Y decían: -Pero, ¿no es este
el hijo de José? Él les contestó: -Seguro que me
diréis aquel refrán: médico cúrate tú. Lo que hemos oído que ha sucedido en
Cafarnaún, hazlo aquí, en tu ciudad. Y añadió: -Os aseguro que
ningún profeta es aceptado en su patria. Ciertamente, os digo, había muchas
viudas en Israel en tiempo de Elías, cuando el cielo estuvo cerrado tres años
y medio y hubo una gran carestía en todo el país. A ninguna de ellas fue
enviado Elías, si no es a la viuda de Sarepta en Sidonia. Muchos leprosos había
en Israel en tiempo del profeta Eliseo; ninguno se curó, sino Naamán el
sirio. Al oírlo, todos en
la sinagoga se indignaron. Levantándose, lo sacaron fuera de la ciudad
y lo llevaron a un barranco del monte sobre el que estaba edificada la ciudad,
con intención de despeñarlo. Pero él,
abriéndose paso entre ellos, se marchó. |
El Espíritu del Señor está sobre
mí.
Is 61, 1-3: El Espíritu
del Señor está sobre mí, porque el Señor me ha ungido. Me ha enviado para dar
una buena noticia a los que sufren, para vendar los corazones desterrados, para
proclamar la amnistía a los cautivos y a los prisioneros la libertad, para proclamar
el año de gracia del señor, el día del desquite de nuestro Dios, para consolar
a los afligidos, los afligidos de Sión: para cambiar su ceniza en corona, su
luto en perfume de fiesta, su abatimiento en traje de gala.
Porque me ha ungido.
Mt 3, 16: Jesús se bautizó, salió
del agua y al punto se abrió el cielo y vio al Espíritu de Dios que bajaba como
una paloma y se posaba sobre él.
Para anunciar a los pobres la Buena
Nueva.
So 2, 3: Buscad al Señor, los
humildes que cumplís sus mandatos: buscad la justicia, buscad la humildad, para
tener un refugio el día de la ira del Señor.
En la sinagoga todos estaban
fijos en él.
Hch 6, 15: Cuantos estaban
sentados en el consejo fijaron la vista en él y vieron que su rostro parecía el
de un ángel.
Notas exegéticas Biblia de Jerusalén.
1 Este prólogo, de
vocabulario escogido y estilo periódico, se parece a los de los historiadores
de la época helenista.
1 1 Enfático: se ha de entender
“algunos”.
1 2 E.d., toda la
materia de este evangelio proviene de la tradición. – Palabra”, término
referente al Evangelio predicado por los apóstoles.
1 3
(a) Podría
traducirse: “después de haber seguido todo de cerca desde tiempo atrás”,
pensando en la actividad misionera de Lucas junto a Pablo. Pero Lc parece
hablar aquí de unos orígenes en los que no participó.
1 3
(b) Podremos
ver en el libro de Lc que no se trata de un orden cronológico, sino literario y
didáctico.
1 4 O, quizá: “de las
noticias que te han llegado”. En este caso, Teófilo no sería un cristiano a
quien se desearía confirmar en la fe, sino un alto funcionario a quien se trata
de informar.
4 14
Estribillo
de Lucas; ver los escritos análogos de Hch 2, 41.
4 15
Jesús
admirado y alabado por las turbas, otro tema predilecto de Lucas, semejante
estribillo precedente 4, 14, y a los temas de las alabanzas de Dios y del temor
religioso.
4 16
(a) Este
relato extraña por el cambio inexplicable de la muchedumbre, que salta de la
admiración a la animosidad. Esta anomalía se debe sin duda a una evolución
literaria. Un primer relato refería una visita a la sinagoga con una
predicación coronada por el éxito, al comienzo del ministerio en Nazaret, ver
Mt 4 13 con Nazara como Lc 4 16. Luego, se ha vuelto sobre el relato,
sobrecargándolo y situándolo más tarde en la vida de Jesús, Mt 13, 53-58, Mc 6,
1-6, para dejar sentada la incomprensión y el rechazo que siguieron a la
primera acogida del pueblo. De este texto complejo, Lucas ha sabido extraer una
página admirable, que ha conservado al comienzo del ministerio, como una escena
inaugural, y donde esboza, en un esquema simbólico, la misión de gracia de
Jesús y la recusación de su pueblo.
4 16
(b) Forma
rara del nombre de Nazaret.
4 16
(c) A
todo judío adulto se le permitía, con autorización del Jefe de la sinagoga,
hacer la lectura pública del texto sagrado.
4 18
(a) Este
texto de Isaías evoca probablemente una consagración profética (ver 1 R 19,
16). Jesús se refiere aquí al Espíritu que acaba de recibir en su bautismo y
que convierte en fuente de su mensaje y de su acción salvífica.
4 18
(b) Adic.:
“a curar a los que tienen destrozado el corazón” ver LXX.
4 19
Lit.:
“un año aceptado del Señor”. La cita de Isaías se detiene ante un final
amenazante “y un día de venganza de nuestro Dios”. El año de gracia (o de buena
disposición) designa el año jubilar celebrado por ley cada cincuenta años (Lv 25,
10-13).
4 21
Lit.:
“a vuestros oídos”. Jesús presenta su venida como el acontecimiento de la era
de gracia anunciado por el profeta. Lc alude con frecuencia al hoy de la
salvación.
Notas exegéticas Nuevo Testamento, versión crítica.
1 1-4
En La
línea de los historiógrafos griegos, haciendo lo que Jenofonte aconsejaba al historiador
– comprobar y contrastar personalmente lo que narra –, Lucas redacta un prólogo
explicando la finalidad y el método seguido al escribir (cercano a él en el
tiempo, otro historiador, el judío romanizado Flavio Josefo, promete al
comienzo de su obra “no añadir ni omitir nada”); pero, como escribe historia
sagrada, e.d., la continuación del AT, de hecho su modo de “escribir historia”
es, más bien, el propio del AT.
1 1 PUSIERON MANO A:
lit. pusieron-las-manos-en; emprendieron la tarea de; se aplicaron a. //
COMPILAR: o bien: ordenar, organizar, componer; y casi también reconstruir
de memoria. // SE CUMPLIERON (o se llevaron a término): lit. fueron
cumplidos (por Dios; voz pasiva “teológica”); probable alusión al “cumplimiento
de las promesas mesiánicas del AT.
1 2 TRANSMITIERON: “transmitir”
es término técnico de la tradición doctrinal. Lc concede merecida
importancia a los TESTIGOS DE VISTA y a los SERVIDORES (“ayudantes”, quizás ya
difusores por escrito) DE LA PALABRA. Esa “palabra” es, directamente, el
Evangelio (menos probablemente: Jesucristo-Palabra). Uno de esos SERVIDORES DE LA
PALABRA fue Juan Marcos (cf. Hch 13, 5).
1 3-4
ME PARECIÓ
(BIEN): e.d., me pareció lo mejor; de ahí el significado de decidir, que
este verbo tiene en actos de gobierno o judiciales (cf. Hch 15, 28). // ORDENADAMENTE;
según un orden catequético o pedagógico, no precisamente cronológico a nuestro
gusto moderno. Para Lucas, hay en la Historia Sagrada tres grandes épocas: el
tiempo de Israel (AT), el tiempo de Jesús k(Lc), el tiempo de
Jesús prolongado en la Iglesia (Hch). // TEÓFILO (cf. Hch 1, 1): destinatario
desconocido (¿alto cargo?, ¿ya cristiano?, ¿todavía catecúmeno (cf. v. 4)?,
¿pagano, con alguna información sobre el cristianismo? O ¿es seudónimo (Teófilo
= amigo de Dios), representativo de un grupo o tipo de personas? // DESDE EL
COMIENZO: O desde hace tiempo. Él v. 4 podría traducirse: para que
reconozcas las enseñanzas (lit. las palabras) en cuya solidez has
sido instruido. El verbo griego traducido por has sido instruido es
el verbo de la catequesis (katêkhéô); por tanto: has sido catequizado.
4 14
CON
APROBACIÓN DE: lit. aprobado por.
4
16-30 Algunos piensan que Lc concentra en un relato dos visitas de Jesús a
Nazaret, una al comienzo de su vida pública, y otra, de claro rechazo, más
tarde. Tal como está, el texto supone que Jesús ya ha actuado en público algún
tiempo, y ahora expone su programa en los comienzos de su ministerio. La Misná[1] fija por escrito las normas sobre las lecturas en
el culto sinagogal (“en sábado (leen) siete… Se concluye con una lectura tomada
de los profetas… En la lectura de los profetas se puede saltar de un texto a
otro…” (Meguilá 4, 2.4), pero en tiempos de Jesús, las lecturas de los profetas
no estaban ordenadas exactamente: el lector elegía el texto.
4 16
NAZARET:
en el texto griego aparece este nombre en la forma rara Nadsará. // EN
DÍA DE SÁBADO: lit. en el día de los descansos.
4 17
ENCONTRÓ:
con el matiz de llegó a (buscando ese pasaje llegó a él), lo que hace
sospechar la existencia del arameo ’skj como trasfondo (Herranz Marco).
4 18
(EL)
ESPÍRITU…, SOBRE MÍ: alusión al bautismo (3, 21s.).
4 19
UN
AÑO DE GRACIA…: la expresión combina dos aspectos: un año en el que Dios da
gracias, y un año grato a Dios.
4 20
El
AYUDANTE el empleado – sacristán – de la sinagoga (jazzan). Descontando
este pasaje, más 1,2 (servidores) y Jn 18, 36 (hombres), en los
Evangelios traducimos el término griego por alguacil, subalterno de un
tribunal; de hecho, una de las funciones era la de verdugo encargado de ejecutar
las sentencias de flagelación (cf. Mt 5, 25). // LOS OJOS DE TODOS…: comentó
Orígenes en una de sus Homilías: “También ahora, si queréis, podéis
fijar los ojos en el Salvador. Cuando la mirada más profunda de tu corazón la
diriges a la contemplación de la Sabiduría, de la Verdad, del Hijo único de
Dios, tienes los ojos clavados en Jesús… Quisiera que esta asamblea pudiera
recibir un testimonio semejante: que todos, catecúmenos y fieles, varones y
niños, tengan los ojos, no los del cuerpo sino los del alma, mirando a Jesús.
Cuando lo miras, su luz y su destello iluminan vuestros rostros con resplandor
mayor”.
21 HOY… se realiza esa
profecía, no en forma de la esperada liberación material: “No hay que confundir
la salvación con una u otra liberación (político-social); la buena nueva deberá
conservar su originalidad propia: la de un Dios que nos salva del pecado y de la
muerte y nos lleva a la vida divina” (Pablo VI). // ANTE VOSOTROS QUE ME OÍS:
lit: en los oídos de vosotros (semitismo): ante este auditorio.
Notas exegéticas
desde la Biblia Didajé.
1 3 Teófilo: Aunque la identidad
de la persona es incierta, el nombre significa “amado por Dios”, saludo general
que puede referirse a todo miembro de la comunidad cristiana.
4 17
Estas
palabras de Isaías (61, 1) fueron ampliamente interpretadas por los judíos del
siglo primero para indicar que el Mesías sería un líder poderoso que liberaría
a Israel de los romanos. Cristo, en cambio, ofreció a su pueblo la liberación
del pecado y de la muerte. Las palabras, “anunció la salvación a los pobres, la
liberación a los oprimidos y a los afligidos el consuelo”, se repiten en la
plegaria eucarística IV en la Misa. La cita de Isaías se refiere al Cristo (en
hebreo mesías), es decir, al “ungido”. Jesús es el ungido de Dios en
cuanto que su humanidad recibió la plena unción del Espíritu Santo; él era el
Cristo desde su misma concepción, es decir, en razón de su unión hipostática
recibió la plenitud de la gracia. Cat. 695, 714, 2443, 453.
Catecismo
de la Iglesia Católica.
695 La unción. El simbolismo de la
unción con el óleo es también significativo del Espíritu Santo, hasta el punto
de que se ha convertido en sinónimo suyo. En la iniciación cristiana es el
signo sacramental de la Confirmación, llamada justamente en las iglesias de
Oriente “Crismación”. Pero para captar toda la fuerza que tiene, es necesario
volver a la unción primera realizada por el Espíritu Santo: la de Jesús. Cristo
(“Mesías” en hebreo) significa “Ungido” del Espíritu de Dios. En la Antigua
Alianza hubo “ungidos” del Señor, de forma eminente el rey David. Pero Jesús es
el Ungido de Dios de una manera única: la humanidad que el Hijo asume está totalmente
“ungida por el Espíritu Santo”. Jesús es constituido “Cristo” por el Espíritu
Santo. La Virgen María concibe a Cristo del Espíritu Santo, quien por medio del
ángel lo anuncia como Cristo en su nacimiento e impulsa a Simeón a ir al Templo
a ver al Cristo del Señor; es de quien Cristo está lleno y cuyo poder emana de
Cristo en sus curaciones y en sus acciones salvíficas. Es él en fin quien
resucita a Jesús de entre los muertos. Por tanto, constituido plenamente “Cristo”
en su humanidad victoriosa de la muerte, Jesús distribuye profusamente el
Espíritu Santo hasta que “los santos” constituyan, en su unión con la humanidad
del Hijo de Dios, “ese Hombre perfecto (…) que realiza la plenitud de Cristo”
(Ef 4, 13): “el Cristo total” según expresión de san Agustín.
714 Por eso Cristo
inaugura el anuncio de la Buena Nueva haciendo suyo este pasaje de Isaías (Lc
4, 18-19): “El Espíritu del señor está sobre mí, porque me ha ungido. Me ha
enviado a anunciar a los pobres la Buena Nueva, a proclamar la liberación a los
cautivos y la vista a los ciegos, para dar la libertad a los oprimidos y
proclamar un año de gracia del Señor”.
2443
Dios
bendice a los que ayudan a los pobres y reprueba a los que se niegan a hacerlo:
“A quien te pide da, al que desee que le prestes algo, no le devuelvas la espalda”
(Mt 5, 42). “Gratis lo recibisteis, dadlo gratis” (Mt 10, 8). Jesucristo reconocerá
a sus elegidos en los que hayan hecho por los pobres. La buena nueva “anunciada
a los pobres” (Mt 11, 5) es el signo de la presencia de Cristo.
453 El nombre de Cristo
significa “Ungido”, “Mesías”. Jesús es el Cristo porque “Dios le ungió con el
Espíritu Santo y con poder” (Hch 10, 38). Era “el que ha servir” (Lc 7, 19), el
objeto de “la esperanza de Israel” (Hch 28, 20).
Notas exegéticas Biblia del Peregrino
1, 1-4 Lucas compone con gran cuidado
un prólogo en el estilo retórico de la época, para justificar o explicar el
nuevo relato de hechos ya contados, el método de estudio y exposición, la
finalidad del libro.
4, 16-30 Jesús se ajusta al ritual y lee
la perícopa señalada: Is 61, 1-2 según la versión griega, con un verso
sustituido por 58, 6 y con el verso final suprimido. Jesús no lee sin más un
texto casual de la Escritura. A la enseñanza polémica de Jesús, citando a Elías
y Eliseo como taumaturgos al servicio de los paganos (1 Re 17, 1-7; 2 Re 5,
1-27) responde ya la indignación de los paisanos. Si Jesús no acredita su
pretensión con un milagro, es usurpador del título mesiánico y merece la
muerte.
Comentarios
de los Santos Padres.
En tiempos del Nuevo
Testamento hubo muchos ensayos para escribir evangelios, pero no todos fueron
aceptados. Debéis saber que no solo se escribieron cuatro evangelios sino
muchos más. Los que poseemos fueron elegidos y transmitidos a las iglesias, y
eso lo sabemos por el mismo prólogo de Lucas, que empieza de esta manera: “Ya
que muchos han intentado poner en orden la narración”. Las palabras “han
intentado” encierran una acusación directa contra aquellos que, sin la gracia
del Espíritu Santo, se propusieron la redacción de unos evangelios. Mateo,
Marcos, Lucas y Juan no intentaron escribir, sino que llenos del Espíritu Santo
escribieron los evangelios. (…) Conozco un evangelio denominado “Según Tomás”,
y otro “Según Matías”, y hemos leído otros muchos para no ser ignorantes ante
los que se imaginan cualquier cosa cuando conocen estos textos. Pero, con todo,
nosotros no aprobamos sino los que aprueba la Iglesia, es decir, solo hay que
admitir cuatro evangelios.
Orígenes (c.184-c.253
d.C.), Homilías sobre el Ev. de Lucas 1, 1-3. III, pg. 42.
Este evangelio ha
sido escrito para Teófilo, es decir, para que el que es amado por Dios. Si amas
a Dios, para ti ha sido escrito; si para ti ha sido escrito, recibe este regalo
del evangelista, conserva con cuidado en lo más profundo de tu corazón este
recuerdo de un amigo.
Ambrosio, Exposición
sobre el Ev. de Lucas, 1, 12. III, pg. 44.
“Para poner en
libertad a los oprimidos”. ¿Hay un ser más oprimido y roto que el hombre antes
de ser liberado por Jesús? “Para proclamar el año de gracia del Señor”… Todas
estas realidades fueron anunciadas para que, después de haber pasado de la
ceguera a la visión y de la esclavitud a la libertad, curados de muchas heridas,
alcancemos “el año de gracia del Señor”.
Orígenes, Homilías
sobre el Ev. de Lucas, 32, 4-5. III, pg. 135.
En verdad también
aquello es un año de gracia en todos los sentidos, pues fuimos aceptados en su
familia y aceptados por Él, después de haber sido lavados de todo pecado por el
santo bautismo y hechos partícipes de su naturaleza divina por la comunión del
Espíritu Santo. En verdad es un año de gracia, en el que manifestó su gloria
mediante milagros inefables.
Cirilo de
Alejandría, Comentario al Ev. de Lucas, 4, 18. III, pg. 136.
“Hoy se cumple esta
profecía en vuestros oídos”, de manera que no pudieran interpretar mal la
presente profecía. En efecto, Él mismo anunciaba el reino de los cielos a los
gentiles, que eran pobres, que no tenían nada ni siquiera a Dios, ni Ley, ni
profetas; más bien (se lo predicó) a todos los que carecían de riquezas
espirituales. Él mismo liberó a los cautivos y destruyó al tirano, apóstata, es
decir a Satanás. Él mismo difundió la luz divina e intelectual entre los
corazones oscurecidos. Por eso decía: “Yo soy la luz que ha venido al mundo”.
Él mismo liberó de las ataduras del pecado a quienes tenían un corazón
contrito. Él mismo mostró la vida futura y amenazó con un juicio justo. Él mismo
predicó el año de gracia del Señor en el que tuvo lugar la predicación de Cristo.
Pienso que en el año de gracia se refería a la primera venida; en cambio el día
de la retribución es el día del juicio.
Cirilo de
Alejandría, Comentario del Ev. de Lucas, 4, 18. III, pg. 136-137.
San Agustín
¿Quién, pues, libra de la muerte y de la esclavitud, sino el libre entre
los muertos? ¿Quién es el libre de los muertos, sino el que está sin pecado
entre los pecadores? He aquí que viene el príncipe del mundo – dice nuestro
mismo Redentor, nuestro Libertador –, he aquí que viene el príncipe del mundo
y nada hallará en mí (Jn 14, 30). Tiene sujetos a los que engañó, a los que
sedujo, a aquellos a los que persuadió el pecado y la muerte; pero en mí no
hallará nada. Ven, Señor; ven, Redentor, ven; reconózcate el cautivo, huya
de ti el cautivador; sé tú mi libertador. Me halló perdido aquel en quien el
diablo no halló nada de lo que él hace.
San Juan de Ávila
Este es oficio de ángeles, animar con Jesucristo, que es dar ayuda,
descanso y paraíso y lo demás, y así no será menester pedilles siempre que den,
sino darles lo que han menester; porque Cristo nuestro Señor es el que envió el
Padre para remedio de nuestros males, y después de enseñados los males que nos vinieron
por el pecado, debet
evangelizare illis Iesum (debe anunciarles a Jesús), que es sanare contritos (sanar a los contritos de corazón), y lo que
más dice San Lucas en el capítulo 4 (cf. Lc 4, 18); y estas dos cosas se han de
tratar mucho, scilicet
(A saber),
Jesucristo en la cruz y en el altar. Los que predican reformación de Iglesia,
por predicación e imitación de Cristo crucificado lo han de hacer y pretender.
Recordar e imitar la Pasión de Jesucristo. Plática a los padres de
la Compañía.
I, pg. 827.
Ansí como el Oriente alegra y se muestra muy hermoso, ansí el Hijo de
Dios, el cual fue
ungido para evangelizar a los pobres, sanar a los quebrantados y soltar a los
captivos (Lc
4, 18-19).
Lecciones sobre 1 San Juan (II). II, pg. 445.
¿Qué es la señal de Esaías: Envióme a dar nuevas alegres a los pobres, ad evangelizandum
pauperibus misit me? (Lc 4, 18) Como quien dice: Venísme a preguntar si soy yo el Mesías;
pues mira las señales que el profeta había dicho que en la venida del Mesás
había de haber: veislas aquí cumplidas.
En vísperas de la Navidad. III, pg. 52
Veis aquí lo que dice Cristo. ¿A quién viene a dar nuevas alegres? A
los que no tienen contentamiento, a los que tienen el corazón atemorizado, sin
esperanza de ir al cielo: Envióme mi Padre a dar nuevas a los ángeles, a los pobres (cf. Lc 4, 18). Todos somos pobres, pues nos
podemos quejar del cuerpo y del ánima. La persona que en esta vida más siente
su pobreza más desconsolada está. Y si tenemos seso, esto nos ha de doler, y no
había de entrar en nosotros alegría, etc.
En vísperas de Navidad. III, pg. 58.
-Señor, ¿qué nueva llevaré hoy a mi casa, para que me consuele esta
semana santa? ¿Con qué me consolaréis, Señor, que se me acuerda que he pecado
contra vos, y temo mis pecados y el juicio e infierno? ¿Con qué me consolaré,
que tengo tantas deudas, ha hecho mi ánima muchos pecados? – Envióme al Padre a dar
nuevas alegres a los pobres y a melecinar corazones quebrantados y a dar
libertad a los captivos (cf. Lc 4, 18-19). ¿Qué debéis, hermano? - ¡Oh Señor! Que debo a Dios
tantas deudas, que no sé cuando se las pague, debo más de tres mil pecados
graves y feos (que) he hecho. Por solos los pecados de la lengua que he hecho
merezco tener en el infierno la lengua cortada. Pues pensamientos de mi corazón
no tienen cuenta. Mucho debo a Dios, y tengo que me ha de dar muchos tormentos.
– Pues alegraos, que ya viene Dios, hecho hombre, a daros buenas nuevas, a consolar y melecinar corazones
quebrantados y a dar corona a los que están en ceniza, y año de paz, y
benignidad del Señor (cf. Lc 4, 18-19).
En vísperas de Navidad. III, pg. 59.
¡Oh, quién le oyera decir estas palabras al Señor! Y después de haber
leído, cerró su libro y dijo: Hoy se ha cumplido esta profecía en vuestras orejas (Lc 4, 21), y hízoles un
sermón tan dulce, que todos daban testimonio y decían ser verdad y estaban
espantados de las palabras que decía. Plega a su bondad, que pues el que estaba
allí está agora también aquí, entre nosotros, que nos hable Él a vuestros
corazones y despierte mis labios y abra, vuestros oídos. ¿A qué veniste, Señor,
pues no veniste de balde? El Espíritu del Señor está sobre mí, entended en cuanto hombre, que,
en cuanto Dios, antes el Espíritu Santo procede de Él y del Padre, y por tanto
se ha de entender en cuanto hombre.
En vísperas de Navidad, III, pg. 51.
Debemos traer a la memoria que dice Cristo, por boca del profeta
Isaías, que le
ungió el Espíritu del Señor para consolar los llorosos, y consolar y rescatar
los captivos, y desencarcelar los encarcelados (Lc 4, 18). Lo cual fue dar muestras a los
hombres que éste era el fructo de su pasión, consolar nuestras ánimas; de donde
se saca hacerle nosotros injuria cuando damos lugar que estén nuestras ánimas
afligidas y desconsoladas.
A un discípulo. IV, pg. 760.
San Oscar Romero.
Si quieren un mensaje de alegría y de optimismo, lean a San Lucas. Lean
con qué alegría se cuenta la gran noticia, la buena noticia de que Dios ha
venido y que los pecadores, los marginados, los que necesitan buenas noticias,
la tienen allí en el evangelio y que por eso se llama la buena noticia. La
Iglesia, pues, se hace comunidad que trasmite a Cristo, que sigue la homilía de
Cristo en el estilo de cada uno. Esto es maravilloso, también, cada comunidad,
cada predicador, cada catequista, cada congregación religiosa, cada fisonomía
de la Iglesia tiene su propio carisma, su propio modo de ser, pero entre todos
contamos la maravilla de que Cristo vive a través de su espíritu, en nosotros.
27 de enero de 1980.
Comentario Homilética.
-Contexto:
Presentación
de la obra (1, 1-4).
Sección
dedicada a Juan el Bautista en sus respectivas infancia y misión.
Tentaciones.
-Estructura del
evangelio de hoy:
1, 1-4:
prólogo al evangelio.
4, 14-15: sumario
de la actividad de Jesús.
4, 16-21:
inicio de la predicación en la sinagoga de Nazaret.
MISA DE NIÑOS. IV DOMINGO TIEMPO ORDINARIO.
Monición de entrada.
Buenos días:
Estamos otro domingo en la iglesia, como hacía Jesús cuando iba a la
sinagoga.
A Jesús le gustaba ir allí para escuchar la palabra de Dios.
Y hoy volveremos acordarnos de cuando fue a la de su pueblo.
Por eso dejemos que Dios nos hable como habló cuando fue Jesús.
Señor, ten piedad.
Tú eres la palabra de Dios; ayúdanos. Señor, ten piedad.
Tu palabra es verdadera; en ti confiamos. Cristo, ten piedad.
Queremos escuchar tu palabra y guardarla en el corazón. Señor, ten
piedad.
Peticiones.
-Por el Papa Francisco, para que le ayudes cuando escucha tu palabra. Te lo
pedimos Señor.
-Por los cristianos que hablan de la palabra de Dios; para que lo anuncien
sin miedo. Te lo pedimos Señor.
-Por los maestros; para que les ayudes a enseñar. Te lo pedimos, Señor.
-Por las personas que les cuesta creer que en la Biblia nos hablas; para
que les ayudes a entenderlo. Te lo pedimos, Señor.
-Por nosotros, para que hagamos caso a lo que nos dices en las lecturas. Te lo pedimos,
Señor.
Acción de gracias.
ORACIÓN PARA EL CENTRE JUNIORS MONTAVERNER-SANT
JERONI ALFARRASÍ. JUNIORS M.D. DOMINGO III T.O.
EXPERIENCIA.
Coloca delante de ti
una cruz, la Biblia y una vela de cera o electrónica encendida.
Realiza la señal de la
cruz.
Permanece un minuto o
más en silencio, sin pensar en nada, observando el pequeño altar que has
levantado, tu espacio de oración.
Inspira pensando en
Dios, en su amor y poder de sanación. Al expirar piensa en tus oscuridades,
dudas, palabras ofensivas, pensamientos negativos, en todo lo que te cierra a
los demás y expúlsalo con la ayuda de Dios a quien has acogido con la
inspiración.
Pide a Cristo que te
conceda el Espíritu Santo que Él recibió durante el bautismo en el Jordán.
Pide al Espíritu Santo la
gracia, el don, de la oración, de la escucha de su Palabra, la interiorización
del evangelio que vas a leer y la capacidad para llevarlo a tu vida.
Permanece en silencio.
Mira el vídeo sin
detenerte a leer los subtítulos:
https://www.youtube.com/watch?v=mDxAL5cWZYk
¿Qué sentimientos ha
despertado en ti?
Vuelve a mirarlo
leyendo las frases que en él se anotan.
Por tercera vez pulsa
el “play”, en esta ocasión deteniéndote en la frase que más te llama la
atención o con la cual puedes permanecer unos minutos en silencio, pensando en
ella.
¿Quién es Jesús para
los autores del vídeo? ¿Quién es Jesús para ti?
REFLEXIÓN.
Toma la Biblia y lee :
X Lectura del santo evangelio según
san Lucas 1, 1-4; 4.14-21.
Ilustre Teófilo:
Puesto que muchos han emprendido la tarea de componer un relato de los hechos
que se han cumplido entre nosotros, como nos los transmitieron los que fueron
desde el principio testigos oculares y servidores de la palabra, también yo he
resuelto escribírtelos por su orden, después de investigarlo todo
diligentemente desde el principio, para que conozcas la solidez de las enseñanzas
que has recibido. En aquel tiempo, Jesús volvió a Galilea con la fuerza del
Espíritu; y su fama se extendió por toda la comarca. Enseñaba en las sinagogas,
y todos lo alababan. Fue a Nazaret donde se había criado, entró en la sinagoga,
como era su costumbre los sábados, y se puso en pie para hacer la lectura. Le
entregaron el rollo del profeta Isaías y, desenrollándolo, encontró el pasaje
donde estaba escrito: “El Espíritu del señor está sobre mí, porque él me ha
ungido. Me ha enviado a evangelizar a los pobres, a proclamar a los cautivos la
libertad, y a los ciegos, la vista; a poner en libertad a los oprimidos; a proclamar
el año de gracia del Señor”. Y, enrollando el rollo y devolviéndolo al que lo
ayudaba, se sentó. Toda la sinagoga tenía los ojos clavados en él. Y él comenzó
a decirles:
-Hoy se ha cumplido
esta escritura que acabáis de oír.
¿QUÉ DICE? la perícopa o fragmento
del evangelio que se lee este domingo tiene dos partes. En la primera Lucas,
siguiendo el estilo retórico de los historiadores de su tiempo indica el nombre
del destinatario, que bien pudo ser un personaje conocido por él o el lector
cristiano (Teo-filo, amigo de Dios), la metodología empleada en la redacción de
la obra y la finalidad. De los primeros versículos del capítulo uno el texto
pasa al capítulo cuarto en el que se nos presenta la acción misionera de Jesús
y la primera parte de la predicación en la sinagoga de Nazaret. En ella,
tomando a Isaías, y teniendo presente que el lector conoce la escena del
bautismo, cuando el Espíritu Santo descendió sobre él en forma de paloma, Jesús
se presenta como el anunciado por Mesías, es decir, Cristo en griego y Ungido en
español, que ha sido enviado para liberar al pueblo de cuanto le oprime. Desde
este marco vuelve a leer el texto las veces que necesites para ir comprendiendo
el significado de cada palabra, frase y párrafo.
¿QUÉ TE DICE? Imagínate que eres uno
de los seguidores que le ha acompañado desde el bautismo. Con la imaginación
recorre los pasos de Jesús, en la sinagoga observa la expectación de quienes
durante años han convivido con él, al asistente entregándole el rollo de
Isaías, abriéndolo con las dos manos, leyéndolo, el movimiento de sus ojos
hacia el libro, los oyentes y el cielo. Busca el significado que tiene para tu
vida en estos momentos. ¿Por qué necesitas de Jesús? ¿Qué te aporta? ¿Jesús es
luz, voz y libertad para ti? ¿Cómo puede ayudarte?
COMPROMISO.
¿Quién necesita de ti? Cerca, en tu lugar de estudio y trabajo, de
vida familiar y ocio, hay personas cautivas de la tristeza, incapaces de escuchar,
víctimas de la soledad, las adicciones, con el sentimiento de ser invisibles
para su familia, amigos, compañeros de estudio o trabajo. Hay ancianos que
esperan que alguien les visite o les dedique más tiempo. Piensa en tus abuelos
o padres mayores, para ellos tú eres las muletas que les levantan, lo mejor que
tienen en estos momentos. Y sin embargo, todos lo hemos hecho, cuando vamos a
verles lo hacemos con el móvil, el reloj y la televisión delante de los ojos, como
quien cumple con un formalismo. No te piden, no nos piden dinero ni grandes
regalos, sino lo más gratuito que tenemos, nuestro tiempo, un tiempo de gracia,
gratis para ellos.
CELEBRACIÓN.
Después
de haber recorrido este camino háblale a Jesús y escucha esta canción. Es el canto
de Isaías proclamado por Jesús en hebreo. En los subtítulos se ofrece la
trascripción con los caracteres hebreos, la fonética en caracteres latinos y la
traducción al español.
https://www.youtube.com/watch?v=Im5-5CT8f80
Con
el rezo del Padrenuestro y la señal de la cruz.
Sagrada
Biblia. Versión oficial de la Conferencia Episcopal Española.
BAC. Madrid. 2016.
Biblia
de Jerusalén. 5ª
edición – 2018. Desclée De Brouwer. Bilbao. 2019.
Biblia
del Peregrino. Edición de Luis Alonso Schökel. EGA-Mensajero.
Bilbao. 1995.
Nuevo Testamento. Versión crítica sobre el texto original griego de
M. Iglesias González. BAC. Madrid. 2017.
Biblia Didajé con comentarios del Catecismo de la Iglesia Católica.
BAC. Madrid. 2016.
Catecismo de la Iglesia Católica. Nueva
Edición. Asociación de Editores del Catecismo. Barcelona 2020.
Secretariado Nacional de Liturgia. Libro de la
Sede. Primera
edición: 1983. Coeditores Litúrgicos. Barcelona. 2004.
Pío de Luis, OSA, dr. Comentarios de
San Agustín a las lecturas litúrgicas (NT). II. Estudio Agustiniano.
Valladolid. 1986.
Merino Rodríguez, Marcelo, dr. ed. en español. La Biblia comentada por
los Padres de la Iglesia. Nuevo Testamento. 2. Evangelio según san Marcos. Ciudad
Nueva. Madrid. 2009.
San Juan de Ávila. Obras Completas I. Audi, filia – Pláticas – Tratados.
BAC. Madrid. 2015.
San Juan
de Ávila. Obras Completas II. Comentarios bíblicos – Tratados de reforma – Tratados
y escritos menores. BAC. Madrid. 2013.
San Juan de Ávila. Obras Completas III. Sermones.
BAC. Madrid. 2015.
San Juan de Ávila. Obras Completas IV. Epistolario. BAC. Madrid. 2003.
San Juan de la Cruz. Obras completas. Sígueme. Salamanca. 1992.
Homilética. Sal Terrae.
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