lunes, 7 de julio de 2008

Escuela de Oración. Semana XIII. Día 5º


XIII Semana. Viernes 4 de Junio de 2008.

En presencia de... :
Muchas veces nos cuesta orar porque no hemos buscado maestros. La oración es un arte y todo arte se aprende copiando e imitando. Si nos acercamos a la Facultad de Bellas Artes descubrimos muchos artistas, jóvenes con gran capacidad para pintar o esculpir. Se encuentran allí aprendiendo y ¿cómo aprenden? copiando. Así es como aprende un pintor a desarrollar toda su capacidad, marchando a un museo y tratando de imitar a los maestros. Posteriormente y fruto de muchas horas de aprendizaje, desarrollará su capacidad creativa y hará de su obra una obra original.
Lo mismo ocurre con los escritores. El buen escritor es aquel que ha pasado muchas horas leyendo a los grandes maestros y se precia tener influencias de sus autores preferidos.
En la oración ocurre lo mismo. También nosotros tenemos que buscar los maestros, estos son los grandes santos como S. Agustín, S. Francisco de Asís, S. Ignacio de Loyola, Santa Teresa de Jesús, Carlos de Foucauld,... y por otra parte tenemos un gran maestro, Jesús, que nos enseña a orar, ofreciéndonos el Padrenuestro. Ésta es la mejor oración, el modelo de toda oración cristiana.
Así pues comienza recitando el Padrenuestro, tranquila y sosegadamente.

Oración preparatoria (La Palabra esperada):
Esta semana recita:
Señor, concédeme estar contigo, contemplarte, escucharte, sentirte... concédeme conocimiento interno de tu Hijo, que por mí se hizo hombre, para que mas le siga y le ame.

El texto (la Palabra escuchada):
Al ver la estrella, se llenaron de inmensa alegría. Al entrar en la casa, vieron al niño con María, su madre. Entonces se postraron y lo adoraron; abrieron luego sus cofres y le ofrecieron dones de oro, incienso y mirra.

Composición de lugar (la Palabra comprendida):
Es muy fácil la composición de lugar. Imagina que eres uno de los Magos, siente la alegría de encontrarte con Jesús y ofrécele tu persona. Fíjate que en los evangelios de la infancia, donde nos narran los primeros años de Jesús sobre todo hay alegría por la llegada del Mesías. Nuestra fe cristiana ha de ser alegre, viva, pues Jesús está en medio de nosotros.

Coloquio:
Es éste un momento muy personal, donde eres tú quien habla de lo que siente tu corazón.

Examen de la oración:
Actitudes ante la oración
Pasos realizados
OraciónExamen del día.

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