Escuela de Oración. Semana XII. Día 3º

XII Semana. Miércoles 25 de Junio de 2008.

En presencia de... :
A veces confundimos teología con oración o reducimos el ser cristiano a saber teología o conocer el catecismo. Es lo que durante años ocurrió y sigue ocurriéndonos. Creemos que con la formación ya somos buenos cristianos. Siendo necesaria ésta, no es lo más importante. Lo fundamental para ser cristiano no está en las ideas, necesarias, sino en el corazón. La teología y la catequesis ayudan a sistematizar lo que sentimos, por otra parte evitan el que hagamos de la religión cristiana nuestra religión, en el sentido de que cristianismo es lo que nosotros sentimos o creemos. Ellas nos introducen en la fe de la Iglesia, la de la comunidad de hombres y mujeres que hemos recibido de Cristo a través de los apóstoles la fe. Por eso es importante la formación. Pero una formación sin oración no nos lleva a ningún sitio. Una teología hecha con la cabeza sin arrodillarse ante Dios es mero discurso, pensamiento, tratado, pero no es experiencia profunda de Dios.
Por eso es tan importante la oración, pues ella da afectividad, corazón a nuestra fe cristiana. Se trata de sentir a Dios para después poder contagiarlo a los demás. Así te invito a comenzar con el sentimiento de adoración. Es decir, arrodíllate bien físicamente o con el corazón, cierra los ojos y reconoce que estás ante Dios. No ante cualquier persona, sino ante Dios. Él está en tu corazón y en la Palabra.

Oración preparatoria (La Palabra esperada):
Esta semana recita:
Señor, concédeme estar contigo, contemplarte, escucharte, sentirte... concédeme conocimiento interno de tu Hijo, que por mí se hizo hombre, para que mas le siga y le ame.

El texto (la Palabra escuchada):
El cual, siendo de condición divina,
no codició el ser igual a Dios,
sino que se despojó a sí mismo
tomando condición de esclavo.
Asumiendo semejanza humana
y a pareciendo en su porte como hombre,
se rebajó a sí mismo,
haciéndose obediente hasta la muerte,
y una muerte de cruz.
Por eso Dios lo exaltó
y le otorgó el Nombre,
que está sobre todo nombre.
Para que al nombre de Jesús
toda rodilla se doble
en los cielos, en la tierra y en los abismos,
y toda lengua confiese
que Cristo Jesús es el Señor
para gloria de Dios Padre.
Filipenses 2, 6-11

Composición de lugar (la Palabra comprendida):
Escucho al Hijo que explica como va a vivir ese plan de redención, como piensa que debe llevarlo a cabo, cuál debe ser su presencia en el mundo, como cree que debe ivir. Sus miedos, sus preocupaciones, sus dudas... ¿cómo viviré?, ¿cómo me manifestaré?, ¿qué será mejor?...
Durante el día descubro la presencia de Jesús, donde él quiso y como él quiso estar.
Hoy por tanto no se trata que pienses en ti, sino en Dios. El junior es una persona que va hacia Jesús y por tanto su mirada no se dirige en primer lugar a si mismo, ni a su centro, sino a Jesús. Así pues utiliza la imaginación para recrear lo que Jesús va a hacer, horas antes de la Anunciación, cuando entre en las entrañas de María.

Coloquio:
Es éste un momento muy personal, donde eres tú quien habla de lo que siente tu corazón.

Examen de la oración:
Actitudes ante la oración
Pasos realizados
Oración
Examen del día.