Escuela de Oración. Semana XII. Día 5º

XII Semana. Viernes 27 de Junio de 2008.

En presencia de... :
Pronto será el campamento y la Iglesia, a través del consiliario, te encomendará que cuides de un pequeño rebañito. No, tranquilo, no vamos a convertir el campa en un campa pastoril, con ovejas, ovejuelas, cabras y, no, cabruelas. Pero simbólicamente así nos llama Jesús, somos ovejas y él es el pastor que cuida de nosotros.
Esas ovejuelas son las que van a subir al campamento y Jesús va a hacerse presente especialmente a través del consiliario y los monitores. Somos pastores llamados a cuidar de un rebañito y llevarlo mediante el juego, el tiempo libre, las celebraciones, el compartir la mesa,... a Jesús, como bien claramente rezamos en la oración junior: “voy hacia ti Jesús, quiero marchar por el camino que tú me marques, para que mi vida sea lo que tú esperas de ella”.
Por eso comienza pensando en los que van a venir y rezando por ellos. También por aquellos que te gustaría viniesen y no vendrán, pídele a Jesús que desde su corazón los lleve hacia él.

Oración preparatoria (La Palabra esperada):
Esta semana recita:
Señor, concédeme estar contigo, contemplarte, escucharte, sentirte... concédeme conocimiento interno de tu Hijo, que por mí se hizo hombre, para que mas le siga y le ame.

El texto (la Palabra escuchada):
Al sexto mes envió Dios el ángel Gabriel a un pueblo de Galilea, llamado Nazaret, a una virgen desposada con un hombre llamado José, de la casa de David. La virgen se llamaba María. Cuando entró, le dijo:
-Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo.
Ella se conturbó por estas palabras y se preguntaba qué significaría aquel saludo. El ángel le dijo:
-No temas, María, porque has hallado gracia delante de Dios; vas a concebir en tu seno y a dar a luz un hijo, a quien pondrás por nombre Jesús. Él será grande, le llamarán Hijo del Altísimo y el Señor Dios le dará el trono de David, su padre; reinará sobre la casa de Jacob por los siglos y su reino no tendrá fin.
María respondió al ángel:
-¿Cómo será esto posible, sino conozco varón?
El ángel le respondió:
-El Espíritu Santo vendrá sobre ti y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso, el que va a nacer será santo y le llamarán Hijo de Dios. Mira, también Isabel, tu pariente, ha concebido un hijo en su vejez y ya está en el sexto mes la que era considerada estéril, porque para Dios nada hay imposible.
Dijo María:
He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra.
Y el ángel la dejó y se fue.
Lc 1, 26-37

Composición de lugar (la Palabra comprendida):
La escena de la anunciación es la más bella de la Biblia. Una mujer de una gran belleza interrumpe sus quehaceres para encontrarse con un ángel que le anuncia el misterio más grande de nuestra fe. Es verdad que te puede costar entenderlo, pero deja de creer en que Jesús nació de María Virgen y dejarás de creer en el cristianismo, de ser católico y por tanto de ser junior, pues un junior es un católico y el junior sin la Iglesia es como una rama sin el árbol, seca y muerta.
Pero ahora no se trata de razonar sino contemplar. Hoy es un día para que en tu interior imagines lo que le ocurrió a María, dejándote iluminar por la luz que irradia la escena. Así nos lo indica el Seminario Menor:
Contemplo la anunciación. Escucho el diálogo del ángel a Mareía. El mensajero de Dios transmite fielmente lo que le han encomendado la Trinidad. Admiro la actitud de María, me asombro de lo que ocurre, no pierdo ni una Palabra. Sobretodo me fino en la respuesta definitiva de María... Durante el día descubro mi actitud ante el proyecto de Dios en mi vida.

Coloquio:
Es éste un momento muy personal, donde eres tú quien habla de lo que siente tu corazón. Recuerda dirigir la oración a las Tres Personas de la Santísima Trinidad.

Examen de la oración:
Actitudes ante la oración
Pasos realizados
Oración
Examen del día.

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